El aumento de la demanda, sumado a condiciones climáticas favorables, posiciona a las arvejas como uno de los principales cultivos invernales a incluir en la secuencia agrícola de zona núcleo. Especialistas del INTA dan sus recomendaciones para obtener los mejores resultados agronómicos, a la vez que reconocidos referentes del negocio describen opciones de comercialización y márgenes económicos.
Los cambios en la dieta de los últimos años vienen generando un visible crecimiento del mercado de legumbres. A tono con esta tendencia, quienes eligen no consumir carne encuentran en las legumbres como la arveja el aporte proteico que obtendrían de los alimentos de origen animal, posicionando al cultivo como uno de las principales opciones invernales a incluir en la secuencia agrícola.
Pero esta oportunidad no es el único factor que llevan a los productores a optar por este cultivo. Gabriel Prieto, especialista en legumbres del INTA Arroyo Seco, Santa Fe, destaca que "la arveja consume menos agua que otros cereales de invierno, fija nitrógeno del aire y compite muy bien con las malezas". Señala también que "esta leguminosa consume entre 230 y 250 milímetros de agua útil, con una eficiencia de uso de alrededor de 10 a 12 kilos de grano por milímetro, por lo que deja en el perfil del suelo un remanente estratégico para los cultivos de verano posteriores, como soja o maíz".
Altos rindes
Enrique Sierra, directivo de Agronort, consultora asociada a Healthy Veg para la producción y comercio de arveja, lo califica como "un cultivo noble y rentable, que ha crecido mucho en los últimos años porque cada vez son más los productores que se animan a sumarlo a la rotación".
Al describir los factores de ello, explica que "hoy contamos con dos oportunidades de siembra, porque están las arvejas primaverales, que se siembran en mayo primeros días de junio y las invernales cuya siembra puede realizarse en junio y julio, lo que le da más espacio al productor para su incorporación". Otro factor aún más relevante que subraya es que "los semilleros le vienen sumando tecnología y esto ha hecho que se incrementen los rindes, que hoy se ubican en promedio entre 30 y 32 qq/ha, aunque se han logrado hasta 40 qq/ha, muy sorprendente para el cultivo en la zona norte de Pergamino".
Buenos márgenes
En cuanto a las opciones de comercialización, Enrique Sierra comenta que "hay distintas formas", pero "la básica y tradicional es exportar el grano a países limítrofes y, en menor grado, volcarlo al mercado interno". Ambas opciones "son buenas" y arrojan "márgenes positivos", considerando que si bien "no cuenta con un precio de referencia" como ocurre con los commodities, "los últimos contratos se hicieron a razón de 350 dólares la tonelada".
Al evaluar los beneficios hizo referencia también a las cualidades agronómicas de la arveja. "Es un cultivo que te entrega el lote en noviembre y, según decida el productor o asesor, se puede hacer soja de primera o maíz" y además es una leguminosa que, si bien no deja la cobertura de una gramínea, aporta buena cantidad de nitrógeno al suelo".
Entre propias y bajo convenio Healthy Veg cultivó en esta campaña cerca de 4.000 hectáreas y va por más. "Cada año estamos pensando en sumar asociaciones con productores de la zona porque siempre nos han respondido y acompañado en el proceso desde la hora cero, porque lo ven como una alternativa rentable y fácil de implementar en la rotación".
