Editorial

Cuidarse del dengue


Condiciones ambientales cambiantes, como el aumento de temperaturas en el centro y el sur del país hicieron que el mosquito transmisor del dengue se desplace a zonas más templadas, llegando a regiones que no registraban casos autóctonos de la enfermedad. Este fenómeno explica en gran medida el aumento de casos y de decesos que informó el Ministerio de Salud de la Nación en el último Boletín Epidemiológico Nacional.  

Según los últimos datos de la cartera sanitaria nacional en lo que va de 2024 se notificaron 102.898 casos, lo que representa el 86 por ciento de los 120.007 registrados en la temporada 2023/2024. Además, en todo ese período se registraron 79 muertes, de las cuales 69 corresponden a 2024. La presencia del dengue y del mosquito transmisor –el Aedes Aegypti– estuvo tradicionalmente asociada a regiones tropicales con un clima que se caracteriza por ser cálido y húmedo durante gran parte del año. Pero ahora se observa que la enfermedad llegó a zonas que antes no eran consideradas endémicas. En Río Negro, por ejemplo, las autoridades sanitarias tomaron nota de casos de dengue en la región y la presencia del mosquito transmisor, aunque hasta la semana pasada no había casos autóctonos. Donde sí los hubo fue en Bahía Blanca y La Pampa, lo que disparó las alarmas ante la presencia de casos que confirman que el dengue ya no es un problema sanitario sólo para las provincias del norte del país. En rigor, la propagación de ésta y otras enfermedades transmitidas por mosquitos ya había sido advertida por científicos de distintos países que explicaron que el cambio climático tiene una incidencia directa en la propagación del zika, el dengue y la fiebre chikungunya.

El especialista en  enfermedades infecciosas de la Universidad de Oxford, Moritz Kraemer, aseguró, en 2016, que el cambio climático contribuyó a expandir el hábitat de  las especies Aedes aegypti y Aedes albopictus en amplias regiones de América y por lo tanto a aumentar las probabilidades de la transmisión de virus desde estas especies hacia los humanos. Ese mismo año, el jefe del departamento de enfermedades infecciosas del Centro Europeo  para la Prevención y Control de Enfermedades, Herve Zeller, coincidió con la observación de Kraemer aunque señaló que el cambio climático no  es único factor que contribuye a la propagación de estas enfermedades y, en ese sentido, explicó que el aumento de los intercambios  internacionales en viajes y comercio también tienen fuerte incidencia. Al año siguiente, la  experta en virología del Instituto Pasteur de París,  Anna Bella Failloux, alertó que el virus del zika podría circular en Europa, mientras que el responsable del Centro  Nacional para Enfermedades Infecciosas de Fort Collins, Colorado, Estados Unidos, Lyle Petersen, explicó que el zika ya fue detectado en mosquitos aedes albopictus de África y  Asia.

Según la OMS, son 34 los países y territorios en las Américas en los que circula el zika, que se puede transmitir por la picadura de un mosquito Aedes. Cabe recordar que una de las formas más efectivas de detener la expansión de enfermedades como el dengue, el zika o el chikungunya es trabajando en la erradicación de los mosquitos que las transmiten. 

Debe recordarse que la fumigación es un recurso que se utiliza en última instancia ya que el uso excesivo de insecticidas puede, con el tiempo, hacer que los mosquitos se vuelvan más resistentes a este tipo de productos. De ahí la importancia de la colaboración de todos los ciudadanos en las tareas de descacharrado en los domicilios, medida que hasta ahora es una de las más eficientes para eliminar los criaderos del mosquito vector. Es importante, entonces, eliminar de los hogares todos los recipientes en desuso que puedan acumular agua, como latas, botellas, neumáticos. Si los recipientes no pueden eliminarse porque se usan con frecuencia, debe evitarse el acceso del mosquito a su interior. Para eso se recomienda tapar tanques, aljibes y cisternas; dar vuelta baldes, palanganas, tambores, etc.; vaciar y cepillar frecuentemente objetos que puedan acumular agua y poner al resguardo bajo techo recipientes que puedan servir de criadero del mosquito.  También es importante cambiar, cada tres días, el agua de bebederos de animales, colectores de desagües de aire acondicionado o lluvia, dentro y fuera de la casa.

Debido a que la transmisión de la enfermedad es predominantemente doméstica, es fundamental el compromiso ciudadano para, entre todos, eliminar los criaderos.


Otros de esta sección...

Aprender durante toda la vida

26 de Abril de 2024 - 05:00
BuscaLo Clasificados de Pergamino y su región
Buscar en Archivo
Tapa del día
00:00
15:42
Errores:  0
Pistas:  38

Tu mejor tiempo:
12:07
Registrate o Ingresá para poder guardar tus mejores tiempos.

Nueva Partida
1 2 3 4 5 6 7 8 9
Editorial
Funebres
Perfiles Pergaminenses
Lejos del pago
Farmacias de turno

LO MÁS LEÍDO