Luego de los ataques y los hechos de público conocimiento, en la Secretaría de Desarrollo Urbano confirmaron ayer LA OPINION que se volverán a colocar los reductores de altura en varias calles; habrá dos estructuras reparadas a nueva para impedir el paso de camiones en Miguel Cané; otro en avenida Pellegrini y arreglarán el que dañaron intencionalmente en Lucio Mansilla.
La instalación de estas estructuras no es azarosa ni mucho menos, ya que se atendió a los reclamos de vecinos del sector, quienes día a día tienen que convivir con el paso de camiones de gran porte que deterioran las calles, sumado a los constantes ruidos que provocan molestias auditivas.
Los reductores de altura, también conocidos como gálibos, marcan las dimensiones máximas de un vehículo o medio de transporte a la hora de circular por un tramo determinado. Esto es especialmente importante en vehículos pesados o de gran tamaño.
"El reductor de velocidad que estaba instalado en calle Miguel Cané fue retirado debido a que la estructura ya se encontraba comprometida, lo que hacía imposible repararlo en el lugar. En consecuencia, se tomó la decisión de retirarlo para realizar las reparaciones necesarias, y una vez completadas, será reinstalado", señaló el funcionario municipal en diálogo con LA OPINION.
"Sin embargo, otro incidente ha ocurrido en calle Mansilla, donde los camiones, al intentar esquivar el reductor, han terminado subiendo a la vereda, específicamente en el área cercana al previo del club Provincial. Esto ha generado una situación compleja, ya que, a pesar de los esfuerzos realizados desde la Secretaría de Inspección General y Tránsito, no es posible vallar esa sección de la vereda. A pesar de las medidas tomadas, algunos conductores no parecen ser conscientes de la importancia de respetar los reductores de velocidad, lo que resulta en daños a la infraestructura", agregó Giugliani en la nota.
Ambos reductores de altura, tanto en calle Cané como en Mansilla, están siendo reparados para ser reinstalados en el mismo lugar. En cuanto a las medidas para evitar el tránsito pesado en áreas no destinadas a ello, las autoridades confirmaron que seguirán implementando estrategias para proteger tanto el pavimento como la seguridad de los residentes de los barrios afectados. "La decisión de colocar reductores y otras medidas fue tomada en conjunto con el área de Tránsito, con el objetivo de preservar la integridad del asfalto y garantizar la tranquilidad de los vecinos", resaltó el titular de Desarrollo Urbano.
Lugares no habilitados
El Código de Zonificación de Pergamino establece zonas específicas para que los camiones puedan estacionarse cuando no están en actividad, y se prohíbe su circulación en áreas no habilitadas para el tránsito pesado. Según las autoridades, no se permite que los camiones ingresen a la ciudad hasta las puertas de las viviendas, como si fueran vehículos livianos. "La idea es restringir la circulación de camiones por calles como Miguel Caneo y Mansilla, que no están habilitadas para ese tipo de tráfico y fueron reparadas específicamente para la circulación de vehículos livianos. Además, ambas arterias están ubicadas en barrios consolidados y zonas residenciales donde habitan familias y niños, lo que hace aún más importante evitar que el tránsito pesado atraviese estas calles", advirtió el arquitecto Esteban Giugliani.
"Se ha observado que algunos camiones que provienen de la zona de Rosario optan por cortar por Mansilla y luego tomar Cané para salir directamente a la autopista Nº 8, evitando así el recorrido completo por el cruce principal. Esta práctica, además de ser ilegal, pone en riesgo la seguridad de los habitantes de los barrios circundantes, convirtiéndolos en zonas peligrosas para quienes transitan a pie o bien lo hacen en vehículos livianos".
Fotomultas y cámaras
En cuanto a futuras acciones, las autoridades anunciaron que se instalarán más reductores de altura en diversas calles de la ciudad. De hecho, ya está definida la colocación de un tercer reductor en la avenida Pellegrini, que también había sufrido daños en el pasado. "Este reductor, al igual que el de Miguel Cané, fue destruido a las pocas horas de haber sido instalado, lo que generó la necesidad de repararlo. Además, se está evaluando la colocación de cámaras de seguridad y sistemas de fotomultas, con el fin de reforzar el cumplimiento de las normativas de tránsito y garantizar la seguridad de los vecinos", adelantó Giugliani.
Seguridad vial
La Agencia Nacional de Seguridad Vial implementa desde 2010 la medida de reordenamiento de tránsito y seguridad vial, que consiste en restringir la circulación de camiones de gran porte en las rutas nacionales del país en determinados horarios y sentidos de circulación durante los fines de semana largos y recambios de quincena, períodos en los que el flujo vehicular aumenta considerablemente.
De la misma manera, los municipios tienen la potestad de tomar determinaciones en el ejido urbano con el objetivo principal de facilitar el normal desarrollo de la circulación de tránsito vehicular, evitando el congestionamiento y potenciales siniestros en la vía pública, permitiendo garantizar una mayor seguridad vial.