Según un informe publicado por la Bolsa de Comercio de Rosario, el precio FOB del aceite de girasol argentino subió un 45 por ciento en el año, alcanzando los 1.140 dólares por tonelada, el valor más alto de los últimos 18 meses. Ante este escenario, los productores esperan una buena campaña con números favorables
En esta campaña aumentó considerablemente la intensión de siembra de girasol que, de una estimación inicial de 1,95 millones de hectáreas, se elevó en 50 mil hectáreas, alcanzando una proyección de área nacional de 2 millones de hectáreas y una estimación de producción de grano que asciende a 4,1 millones de toneladas,como consecuencia de las lluvias y de la mejora en la rentabilidad del cultivo.
Hasta el momento más del 72 % se encuentra sembrado y el 95 % presenta condición de cultivo de normal a excelente. En el Centro-Norte de Santa Fe el crecimiento fue de 22.200 hectáreas hasta alcanzar 127.300, en tanto que en la Zona Núcleo Norte ya se ha implantado el 100% de las 38.850 hectáreas proyectadas; mientras que en la Núcleo Sur se sembró el 87,5% de las 11.800 hectáreas estimadas.
En las cinco subregiones del Sur (Buenos Aires y La Pampa) se registran aumentos en la intención de siembra. Al promediar noviembre se encontraba ya implantado entre un 55,7% en el Sudeste y un 81,7% en el Centro de Buenos Aires.
El norte bonaerense
Obviamente que este escenario también impulsa la siembra en el norte de Buenos Aires, aunque este crecimiento no es de ahora sino que hace ya varias campañas que poco a poco el girasol está volviendo a integrarse dentro de las rotaciones, tal lo destaca Javier Lavandera, profesional del INTA Pergamino. "Ya en las últimas campañas se viene notando un incremento de la superficie con el cultivo, ante los .problemas causados por la sequía provocada por el fenómeno de "La Niña" en campañas anteriores, fundamentalmente en el último ciclo 2023/2024, junto a la aparición del achaparramiento del maíz producido por la chicharrita".
En base a este renovado interés por el girasol, Lavandera junto a Matías Domínguez, también profesional del INTA Pergamino, condujeron un ensayo comparativo de 41 híbridos comerciales de girasol ampliamente comercializados en la actualidad para caracteres de interés agronómico en la zona norte de Buenos Aires.
Esta valiosa experiencia se realizó en la localidad de Arroyo Dulce, partido de Salto a 25 km de la Experimental del INTA en un lote de un productor, que tuvo como cultivo antecesor al maíz y con un manejo que, describe Lavandera, contempló "un barbecho químico para control de malezas aplicando 2 l/ha de Glifosato (66,2 %), 0,8 l/ha de 2.4D (98 %). En presiembra se aplicó 2,5 l/ha de Paraquat, 0,4 l/ha de Sulfentrazone, 1 l/ha de S-Metolaclor y 0,25 l/ha de aceite como coadyuvante".
En las consideraciones finales del trabajo se destaca que "la caracterización realizada sobre los más de cuarenta híbridos comerciales de girasol, indicados para el norte de Buenos Aires, resulta fundamental para la toma de decisiones por parte de asesores y productores a la hora de considerar al cultivo de girasol como una alternativa dentro de las rotaciones de la zona núcleo".
En suma, favorecido por el comportamiento climático, los elevados precios y los avances genéticos que expresan los híbridos disponibles, el girasol genera crecientes expectativas en esta campaña, y no solo tranqueras adentro. El USDA estima que la participación argentina en el comercio mundial de aceite de girasol subiría del 6,3 al 7,5 %, con ventas de 900.000 toneladas de aceite crudo.