Luego que el viernes pasado un grupo de deudores hipotecarios se movilizó para pedir una solución a su situación de los créditos UVA, el Gobierno nacional estudia avanzar con un decreto, algo que generó expectativa.
Así lo hizo saber el propio presidente Alberto Fernández, quien en las últimas horas dio a entender que firmaría un decreto para modificar las condiciones crediticias que se impusieron a los créditos UVA a través de la Ley Nº 25.827 y que podría representar un alivio para quienes tomaron esa deuda que ajusta por inflación.
"Hoy veníamos hablando con Jorge (Ferraresi, ministro de Desarrollo Territorial y Hábitat), y me dice vamos a tener que sacar un DNU para mejorar las condiciones crediticias de los que quieren acceder a una casa, para garantizarnos que la cuota no crezca por encima de las posibilidades del que toma el crédito de pagar", dijo el mandatario desde San Juan.
¿Por qué un DNU? Según explicó Fernández, porque existe una ley dictada por el Gobierno de Mauricio Macri que reguló los créditos UVA y por lo tanto todo lo que haya que modificar en materia crediticia hay que hacerlo por vía de un DNU.
"Piensen la diferencia, antes el problema de las viviendas lo debía resolver el mercado. El mercado y las cuotas subían como subía el dólar, como mandaba el mercado, y lo que estamos pensando con Jorge es que si tomo un crédito no sienta que está entrando en un problema, sienta que está saliendo de un problema", señaló Fernández en clara crítica a la gestión de Macri, quien lanzó estos créditos y puso en una situación muy compleja a más de 100 mil familias.
En mayo, el propio Ferraresi había afirmado que los bancos Nación y Provincia subsidiarán las cuotas de los tenedores de créditos hipotecarios UVA que superen el 35% del ingreso del grupo familiar. Sin embargo, desde el grupo de Hipotecados UVA indicaron que la única entidad que aplicó el tope del 35% con bonificación es el Provincia, ya que el resto de los bancos, como el Nación y el Ciudad, solo extienden la vida del crédito UVA. "Más años, más usura; y los privados desconocen dicha medida", indicaron.
El viernes pasado un grupo de deudores hipotecarios marchó por Avenida de Mayo, mientras que en otras ciudades también hubo reclamos, para pedir una solución a su situación. "La inflación hace imposible seguir pagando estos préstamos", afirmaron. "Ya no podemos seguir haciéndonos cargo de las cuotas desmesuradas que se incrementan mensualmente, porque la inflación en este país es un flagelo", dijo una de las referentes de la movilización Gabriela Spat, quien contó que pidió un préstamo al banco de 1.900.000 pesos y hoy debe más de 8 millones.
Desde el 2017, cuando se implementaron estos préstamos, son más de 105 mil las familias que los sacaron en todo el país. "Las familias Hipotecados UVA y damnificadas por los Créditos UVA fuimos sometidas a un análisis de nuestra capacidad crediticia antes q la entidad otorgará el crédito. Responsabilizar a los deudores es un error político grosero. Las ganancias extraordinarias son innegables", indicaron en un comunicado. (DIB)