El auge del ciclismo amateur, tanto de ruta como estilo mountain bike, sigue en ascenso. A los que nunca dejaron de practicarlo, se sumaron los que lo descubrieron en tiempos de confinamiento, cuando era una de las pocas actividades deportivas posibles. Los coloridos grupos de pedalistas se pueden ver a diario atravesando las avenidas en camino a su recorrido y particularmente los fines de semana los antes desolados caminos rurales reciben el paso de pelotones. Hacia uno u otro punto del Partido, se cuentan de a cientos los pergaminenses que salen a pasar un momentos distinto, independientemente de la experiencia que tengan y sin importar demasiado la velocidad con la que circulan.
Están aquellos que salen en familia por las calles pergaminenses, otros que se acercan al el circuito "El Panorámico" y principalmente se observan a los que se unieron a grupos de cicloturismo para ir sumando kilómetros y kilómetros, poniéndose sus propios límites y desafíos, aunque siempre perduran en el paisaje ciclístico los que compiten y utilizan sus bicicletas para entrenar en estos tiempos donde las carreras están suspendidas por la pandemia.
Tanto profesionales como amateurs se equipan con lo mejor que esté a su alcance, por lo que el aumento de aficionados ha redundando en mayores ventas de rodados 29 (mayor circunferencia de rueda), el preferido por todos.
Las transacciones se dan casi en igual volumen en el mercado de primera como en el de segunda mano. Y con la misma velocidad con que se mueve el rubro, los amantes de lo ajeno encontraron "su negocio" también. Dado su alto valor y la facilidad para acceder a ellas, estas bicicletas se han convertido en la presa del momento.
Las denuncias de robos se dan principalmente en redes sociales, tanto para advertir por si la bici es ofrecida en venta como para señalar zonas y modus operandi de los cacos.
A medida que se van sumando hechos, los entusiastas pedalistas van cambiando sus recorridos y, en caso de no encontrar compañía para salir a rodar, se quedan en sus casas por temor a ser víctimas de la inseguridad.
Estrategias
Como en todos los robos, no hay mucha cosa preventiva que pueda evitarlo cuando la mira del delincuente ya está puesta sobre su objetivo. Pero sí hay acciones que pueden ser disuasivas y otras que brindan, al menos, protección patrimonial. "Aconsejamos a los consumidores que las aseguren", dicen los experimentados Eugenia y Héctor "Chocho" Saranitte, responsables del tradicional comercio del ramo.
"En nuestro local les brindamos confianza y asesoramiento a nuestros clientes; además de hacerle la facturación correspondiente, también le detallamos el número de serie del cuadro, el cual es único en cada una de ellas; y un consejo que solemos brindarle a los compradores es que no salgan solos a pedalear sino que siempre se sumen a pequeños grupos y circulen por lugares bien iluminados y concurridos. También se les recomienda que eviten hacer siempre el mismo recorrido a diario dentro del mismo horario", señaló Eugenia Saranittes en diálogo con el Diario.
"Sabemos que si nos cuidamos de esta forma, evitaremos sufrir algún daño físico y/o robos imprevistos", agregó Héctor.
No cualquier bici
Lejos de ser los típicos robos tras dejar la bicicleta apoyada en la puerta de casa o de un comercio, los ladrones cada vez utilizan técnicas más sofisticadas que permiten abrir o romper cualquier candado en cuestión de segundos. Proteger estos productos, que pueden llegar a costar unos 500 mil pesos, no es fácil, puesto que los seguros privados no cubren los robos en la vía pública, por ejemplo. Algunos incluso niegan la cobertura dentro de los domicilios si la bicicleta no está asegurada a algún punto fijo.
Lo que es evidente de un tiempo a esta parte es que los robos no son aleatorios; no es que la intención es hacerse de una bicicleta sino que los delincuentes van directamente a la búsqueda de ciertas unidades, para las cuales ya tienen un mercado, generalmente de sus partes. Por eso los ataques no se dan en la ciudad sino en los caminos rurales, donde circulan estos rodados, y en el interior de la vivienda de sus propietarios.
"El primer punto y el más relevante es la inseguridad que tenemos en general y falta de compromiso que en algunos casos es evidente", señaló José Castro, bicicletero y pedalista. "Sabemos que hay allanamientos en los barrios sin la orden de las autoridades judiciales aunque se sepa quién tiene la bicicleta; y a su vez, al incrementarse tanto el consumo de todo aquello relacionado con el ciclismo, los delincuentes saben lo que van a robar, están siendo conscientes del elevado precio que tienen los repuestos y accesorios que llevan las bicicletas", agregó el comerciante quien viene advirtiendo a través de las redes sociales de su negocio sobre los riesgos de salir a pedalear solo o bien por lugares con poco movimiento de personas.
¿A dónde van las robadas?
El destino de la gran mayoría de estas bicicletas sustraídas es el mercado de segunda mano. Internet es la vidriera. Sabido es que las redes permiten direccionar el mercado, por lo que basta no incluir a Pergamino y que en cambio vean el producto los ciclistas de otras ciudades, de modo de que la víctima no pueda advertir que están revendiendo su bicicleta. La demanda de estos productos es mucha y una oferta a bajo precio siempre es tentadora, aunque quien está en el mundo del ciclismo fácilmente puede advertir, justamente por el precio, cuando un producto es de dudosa procedencia. Por eso cuando una persona sufre un robo se vale del mismo medio para, con foto mediante, avisar a todos que si ven su bici en oferta, no la compren. Pero las más de las veces, a las pocas horas, las robas ya están vendidas en otra ciudad.
Las redes sociales de los pergaminenses están plagadas de publicaciones que advierten sobre el robo de bicicletas, ofreciendo recompensa y pidiendo ayuda para encontrar el objeto robado. "Nos robaron las dos!!! Compartan por favor", publican en Facebook algunos de los vecinos víctimas de la delincuencia.
Este tipo de hechos es tan común que en los grupos de redes sociales se comparten las imágenes de las bicicletas robadas y así se van mostrando de ciudad en ciudad; "lo más preocupante es que las bicis robadas no aparecen nunca más, ni mercado negro ni nada por el estilo, las bicicletas rodados 29 son las que se están llevando no solo en Pergamino, sino que pasa en todas partes porque el auge del ciclismo es nacional", contó Oscar "Cachi" Castro, histórico bicicletero y uno de los principales mentores del cicloturismo en la ciudad y la zona.
El comerciante, que a diario sale a pedalear con amigos y forma parte de un grupo de ciclismo llamado "Mortadela", que desde hace 10 años reúne los sábados a la tarde para recorrer caminos rurales con entusiastas del pedal, señaló durante la entrevista que "todos los que somos parte de este ambiente nos preguntamos qué pasa con esas bicis robadas, es muy alarmante lo que se padece con este tema y el temor es tan grande que muchas personas temen salir a pedalear en algunos horarios del día".
Estadísticas policiales
En diálogo con el comisario Pablo Scoropad, jefe de la Estación de Policía local, indicó las últimas estadísticas y tienen que ver con el mes pasado; solamente en mayo hubo unas siete denuncias de robos de bicicletas, tres bajo la modalidad de robos, otras tres en hechos considerados asaltos, y el restante catalogado hurto por parte de la Justicia. Esto son los robos denunciados, pero puede estimarse una cifra similar que no llegó a la estadística policial-
Asimismo el titular de la Policía en Pergamino informó que "algunos de los hechos se dieron en caminos vecinales, otros en cercanías de la ruta provincial Nº 32 y dos de las denuncias se tomaron por actividad delictiva dentro de la ciudad", indicó Scoropad en diálogo con LA OPINION; asimismo señaló que en ninguno de los casos expuestos en mayo hubo que lamentar personas heridas. "Entendemos que es una modalidad delictual que tiene en estos tiempos un crecimiento y estamos trabajando sobre el tema, tanto con las fuerzas policiales como con el área de Seguridad del Municipio", aseguró el jefe policial.