El domingo a la tarde la comunidad local se conmocionó por el fallecimiento del piloto de un planeador que se precipitó repentinamente cuando se disponía a iniciar la maniobra de aterrizaje en la pista del Aeroclub. El ingeniero agrónomo colonense Jorge García (74) era el único ocupante del aeroplano y la víctima fatal de este siniestro aéreo.
La muerte del aficionado a las actividades aéreas produjo gran conmoción en el mundo de amantes de los aviones de nuestra ciudad y de Colón. García fue hallado fallecido y desde la Fiscalía 1 iniciaron las actuaciones judiciales por la calificación de "averiguaciones de causales de muerte".
El fiscal Daniel Aguilar intervino cómo subrogante en las actuaciones iniciales hasta que en la Fiscalía 1 se incorpore como agente titular el fiscal Fernando Pertierra. La instructora judicial María Eugenia Tocalini estuvo en el lugar del siniestro en la misma tarde del domingo, instantes después de lo ocurrido. Tocalini coordinó las intervenciones periciales de los especialistas de Policía Científica.
Al igual que cuando ocurren los accidentes de tránsitos o siniestros viales terrestres: hicieron mediciones y ubicaciones de los restos de la aeronave siniestrada en el predio del Aeródromo local de la ruta 8 y el acceso a Pinzón. Los médicos forenses hicieron la operación de autopsia para determinar si el fallecimiento del piloto fue previo al impacto de la aeronave contra la superficie terrestre o si habría sufrido una descompensación cardíaca que le podría haber provocado que perdiera el control previo a que cayera precipitado desde una altura muy extensa.
Los encargados de la instrucción judicial no descartan ninguna hipótesis, pero dependen de los informes de los resultados periciales. En el expediente todavía no están los reportes de las pericias de la operación de autopsia y las mediciones de los especialistas en accidentología.
Declaraciones testimoniales
La Fiscalía 1 también está recibiendo declaraciones testimoniales de técnicos, aficionados y autoridades del Aeroclub y del Aeródromo provincial para que brinden valoraciones de conocedores del piloto y sus antecedentes en la aviación y las consideraciones sobre los funcionamientos de las aeronaves como la siniestrada.
En este sentido, es importante destacar que los aeroplanos no cuentan con motores y tienen la capacidad de volar a través de planear en corrientes de aire, gracias a sus largas alas. Por ese motivo no cuentan con un motor para determinar si pudo haber sido una falla mecánica.
Los restos de alas y alerones pueden dar indicios sobre las posibles averías de estos elementos que son lo que lo mantienen en el aire y permiten las maniobras adecuadas de aterrizajes. Los especialistas pueden esclarecer cuales fueron los daños ocurridos tras el impacto y si hubo presuntas averías previas al choque de la aeronave con la tierra.
Los movimientos sobre las alas y alerones lo realizan con la palanca de vuelo cuyo funcionamiento mecánico también es materia de análisis para establecer si tuvo daños previos a caer en picada o su rompieron con el impacto. El instrumental del aeroplano es mínimo y se reduce a mínimos indicadores referenciales para el piloto.
El planeador es un tipo de aeronave no motorizada que requiere un alto nivel de destreza para su manejo, especialmente durante maniobras críticas como el aterrizaje. Las primeras hipótesis apuntan a que el planeador pudo haber entrado en pérdida, es decir, haber perdido la sustentación necesaria para mantenerse en el aire, lo que habría llevado a la caída. El planeador era un PW-5 perteneciente al Aeroclub Pergamino que se usa para que los aficionados sumen horas de vuelo con fines de entrenamiento.
La investigación de la JST
El investigador de la Junta de Seguridad en el Transporte estuvo en la tarde del domingo al ser notificado por las autoridades del Aeroclub y del Aeródromo local sobre el siniestro. La JST desarrolla investigaciones técnicas que buscan conocer las causas de los accidentes para evitar que vuelvan a suceder, son independientes de las investigaciones de la justicia.
Los informes técnicos de la entidad tienen tres instancias para brindar resultados públicos. Dentro de las primeras 72 horas suben a la página de Internet oficial los datos mínimos del siniestro. En el término de 45 días brindan un informe técnico preliminar que brinda amplios detalles de la intervención del inspector. En un año suelen dar a conocer los resultados finales del análisis técnico especializado.
El resultado del reporte abarca los análisis de los restos de la aeronave y determina si las averías podrían haber incidido en el accidente. También incorporan los testimonios de las personas vinculadas directamente al vuelo. Además, los exámenes psicofísicos y antecedentes clínico del piloto son valoraciones a tener en cuenta en la intervención técnica.