Ivana Tribouley, concejal de la Libertad Avanza, explicó porqué acompaña la reforma y el programa de privatizaciones del oficialismo local. Durante la jornada del pasado martes, el HCD avanzó en el tratamiento del proyecto, que será votado el próximo lunes, ya que la sesión entró en pausa hasta ese día. La edil libertaria adelantó que votará el plan de reformas enviado por el Poder ejecutivo local, con lo cual la iniciativa del Ejecutivo tendrá los votos necesarios para ser aprobada. La participación de la concejal es clave ya que despegó del criterio del bloque al que pertenece.
En diálogo con LA OPINION explicó los motivos por los cuales acompaña el proyecto y se diferenció de sus pares de la bancada libertaria al asegurar que "no se puede ser liberal en jurisdicción nacional y socialista en la local".
¿Porqué no había acompañado la reforma en la sesión anterior?
-Entendimos que no estaban dadas las condiciones para debatir. No estaban dadas las condiciones, como lo manifestó el presidente de nuestro bloque con relación a la seguridad, tampoco el planteo del tratamiento de la ordenanza y cuestionamiento de la audiencia pública.
-¿Y que cambió ahora para que se desmarque de la decisión del bloque libertario?
-Desde el punto de vista político, el proyecto del Poder Ejecutivo local está en línea con las politicas públicas nacionales, destinadas a una reducción del gasto y a un achicamiento del Estado; y en este caso específico del de reforma del Estado municipal.
Tal como se manifestó en la reunión de Comisión de Legislación ampliada donde participaron todos los concejales y en la Comisión Externa laboral donde los representantes del Poder Ejecutivo expresaron que el proyecto no importará la pérdida involuntaria de trabajo de agentes municipales. También se reformó mediante la gestión de este bloque el proyecto de ordenanza que finalmente se trató y que difiere del originalmente propuesto por el Ejecutivo.
En mi caso, desde que fui convocada a participar en este espacio político liderado por el hoy presidente Javier Milei, vengo bregando por sostener las políticas nacionales por la implementación de este tipo de reformas del Estado, que implican no solo un achicamiento del Estado, por un lado, sino un mayor aporte del sector privado, lo que mejorará sin duda alguna la eficiencia de esos servicios. Por otro lado, esta reforma implicará un Estado más eficiente en las áreas y tareas que conserve para sí.
Me resulta difícil sostener un voto negativo contra este proyecto, y así se lo manifesté a mis compañeros de bloque, ya que este proyecto está en línea con las ideas de la libertad que nos inculca nuestro presidente.
Corresponde por una cuestión de principios y conciencia apoyar tales proyectos, haciendo todo lo que esté a mi alcance por mejorarlos; tal como ocurrió con el proyecto de reforma del Estado municipal, que luego de un debate amplio, compuesto por reuniones con integrantes del Ejecutivo municipal, reuniones entre concejales de distintos bloques, y demás tareas tendientes a su análisis y mejora, votamos un despacho que contiene un proyecto muy mejorado al presentado originalmente, que reúne los consensos necesarios para que una norma cumpla realmente sus fines en un sistema republicano.
Ahora bien, luego la tarea no termina allí, cada proyecto político aprobado implica su correcta ejecución, momento en el cual tenemos que bregar por el estricto cumplimiento de las leyes vigentes, sobre todo en lo que refiere a contrataciones del Estado; para lo cual, mi compromiso es trabajar desde mi función de contralor para que las actuaciones que se inicien y deriven en la contratación de una empresa privada, gocen de la total transparencia y donde la fiscalización de Honorable Concejo Deliberante cobra plena relevancia.
Por último, es función natural de este Honorable Concejo Deliberante, como de cada uno de los integrantes de este cuerpo exigir el cumplimiento de todos los compromisos asumidos por Poder Ejecutivo a través de un seguimiento permanente sobre la actuación de ese privado al que le fue delegado, vía contratación estatal, la prestación de un servicio, la concreción de una obra, o la realización de una tarea; de modo tal que ese privado, en su permanente evolución y progreso empresarial, vuelque sus innovaciones, la adquisiciónn de tecnología, en la prestación del servicio o tarea para la cual fue contratado por la Municipalidad, produciendo con ello una mejora en la calidad de vida de nuestros vecinos.
¿Cómo queda ahora la relación con el bloque?
Todo debería seguir sin cambio alguno. Creo que en el espacio existe o debería existir un denominador común que encontramos en las ideas libertarias. Y estas deben seguir una línea de coherencia entre las políticas que nos impone nuestro presidente y las que nos toca defender desde este Honorable Concejo Deliberante.
Es decir, no se puede ser liberal en jurisdicción nacional y socialista en la local o votar respondiendo a intereses mezquinos. Esa incoherencia me genera, como ya dije, cierta incomodidad y creo que si tengo una pequeña parte del mandato de los pergaminenses en las urnas del año pasado, es para cuidar esa cuota de liberalismo que nos enseña nuestro presidente, cuidando el gasto público y poniendo el acento en la eficiencia en el manejo de los recursos del Estado.
Si cuidamos nuestro mandato y las ideas del presidente Milei, el bloque va a gozar de buena salud. Como dijo Milei, no vino a guiar corderos si no a despertar leones. ¡Viva la libertad carajo!