Policiales

Ludueña admitió el crimen y alegó no recordar porque estaba borracho


El acusado del homicidio de Miguel Gorostidi declaró ante los jueces en la última jornada del juicio oral. El fiscal Pablo Santamarina pidió 16 años de prisión y el abogado querellante, Aquilino Giacomelli, en representación de la familia de la víctima requirió una condena a prisión perpetua y el defensor, Rodrigo Cuellar, solicitó la pena mínima.

Matías Ludueña declaró ante los jueces Guillermo Burrone, Carlos Picco y Renato Santore y se sometió al interrogatorio de la Fiscalía el abogado querellante en la última jornada de juicio oral en el que ocupa el banquillo de los acusados por el homicidio de Miguel Gorostidi.

Ludueña admitió ser el autor del crimen, pero alegó que durante esa celebración ingirió mucho alcohol mezclado con pastilla en una jarra y olvidó lo ocurrido.

El abogado defensor Rodrigo Cuellar Aliaga le dijo a los jueces que declararía para dar su versión de los hechos.

Ante los jueces integrantes del Tribunal Oral en lo Criminal 1 hizo un relato de lo ocurrido durante la celebración de un cumpleaños de quince en el salón de la parroquia del barrio Güemes en la madrugada del domingo 28 de noviembre de 2021.

El acusado de atacar con un puñal en la espalda a uno de los invitados y provocarle la muerte por la letal agresión atribuyó la ausencia de recuerdos sobre lo ocurrido porque consumió alcohol.

En su relato contó que con Miguel Gorostidi mantuvo un breve diálogo al acercarse en son de paz para decirle que estaba todo bien y no generaría incidentes durante el festejo.

Ya los familiares de la cumpleañera le habían dicho que lo dejaban permanecer si no protagonizaba incidentes ya que no estaba en la lista de invitados.

Así afirmó que "yo no tuve la intención de generar nada malo y sólo fui a escuchar música", expresó en relación a su permanencia dentro de la fiesta.

"En la puerta había una juntada", dijo en relación a varias personas que estaban en la vereda. "Dónde había jarras con vino y otras preparaciones con bebidas alcohólicas y pastillas", detalló. 

De esta manera, dio a entender que bebió de esas preparaciones hasta quedar muy alcoholizado.

El fiscal Santamarina y el abogado penalista Giacomelli lo indagaron sobre el ataque con el puñal.

El acusado evadió responder esos interrogantes invocando el estado de ebriedad que le impedía recordar.

La Fiscalía y la querella cuestionaron duramente estas supuestas amnesias para evitar dar cuentas de la agresión letal provocada.

En los alegatos finales el fiscal Santamarina pidió a los jueces que condenen a Ludueña a 16 años de prisión por la calificación de homicidio simple.

Giacomelli requirió al Tribunal Criminal la máxima condena de prisión perpetua por considerar el agravante de alevosía al delito de homicidio.

Fiscal Santamarina

La Fiscalía en los alegatos finales pidió a los jueces una condena a 16 años de prisión.

"Esa madrugada del 18 de noviembre del 2021, les prometimos que íbamos a demostrar que Matías Ludueña acestó una apuñalada a Miguel Gorostidi mientras se celebraba un cumpleaños de 15 en la iglesia del barrio Güemes, de Deán Funes y Nicaragua", consideró el fiscal.

Para la Fiscalía Miguel Gorostidi murió desangrado por el ataque con un arma blanca perpetrado por Ludueña.

Al joven lo apuñalaron por una bronca que el agresor tenía con un amigo de Gorostidi. Durante las audiencias de juicio oral surgió que Matías Ludueña había sido apuñalado previamente por un tal "Frutillita", amigo de Gorostidi. A partir de esa agresión la bronca quedó contra Miguel.

Por ese motivo aseguraron que al joven se la tenían prometida de antemano y se trataba de una "muerte anunciada".

El cumpleaños de 15 era de una adolescente vinculada a la familia Ludueña y Miguel Gorostidi mantenía una relación sentimental con Leonela.

A la celebración social de esa noche fue a acompañar a su novia, con quien estaba en pareja desde hacía casi cinco años.

La cena y la sobremesa la compartió con su suegro, con quien trabajaba en un horno de ladrillos y otros familiares.

A Miguel lo cuidaron y se mantuvieron alejado de dónde estaban los jóvenes de la "juntada", con Matías Ludueña; quien ya había protagonizado incidentes contra el joven Gorostidi.

Así todo, Ludueña se las ingenió para acercarse en un momento, al comienzo de la celebración, a decirle que estaba todo bien.

Horas después apareció por atrás y le clavó una puñalada en la espalda que ingresó en la zona lumbar y afectó órganos vitales.

El fiscal Santamarina invocó los informes de la autopsia que confirmaron las expresiones coloquiales de la familia que murió "desangrado".

Los relatos de los testigos coincidieron que Ludueña apareció sorpresivamente por detrás y le asestó la agresión.

Santamarina sintetizó el sentimiento de lo ocurrido como muy previsible, de acuerdo a lo que se sabía que iba a pasar.

"Lo ocurrido fue la crónica de una muerte anunciada, o la crónica de un ataque anunciado, si quieren, para no ser tan dramáticos", digo figurativamente el fiscal.

Desde la Fiscalía establecieron que desde hacía un año que a Miguel Gorostidi lo venía hostigando Ludueña. "Ludueña estaba obsesionado con Miguel. Lo persiguió durante por lo menos un año, cuando el agresor había sido otro", en referencia a "Frutillita" y el episodio anterior en el que apuñaló a Ludueña.

Los relatos de los testigos acreditaron toda esta situación anterior de hostigamiento en días anteriores y el momento del ataque.

Tras apuñalar a Gorostidi el agresor escapó corriendo sin que pudiera ser alcanzado por jóvenes de igual contextura física y de la misma edad.

Esa huida intensa tras saber que cometió una agresión letal es una prueba que la ebriedad no le impediría comprender el mal que provocó.

Prisión perpetua

El abogado Aquilino Giacomelli requirió a los jueces que condenen a prisión perpetua a Matías Ludueña.

El querellante pidió que encuadren lo ocurrido con el agravante de la alevosía para condenar por la máxima pena.

Giacomelli sostiene la figura de la alevosía porque Ludueña se acercó más de una oportunidad, lo vio, lo tenía de frente y esperó que Gorospidi estuviera en total estado de indefensión para poder asegurarse su provecho, para que no fuera advertido su ataque. Tal es así que como el propio imputado lo dijo, se acercó más de una oportunidad, incluso en un momento dijo hasta nos abrazamos. Cuando Miguel Gorospidi estuvo de espaldas al descubierto de cualquier ataque certero, ahí aprovechó en un ataque sorpresivo, entró corriendo sin emitir palabra, sin decir nada y le asestó la puñalada por la espalda", detalló el agogado que representa los intereses de la familia.

Veredicto

El mediodía del jueves 10 de octubre en la sala de audiencias del Tribunal Oral en lo Criminal 1 los jueces Guillermo Burrone, Carlos Picco y Renato Santore darán a conocer el veredicto condenatorio.


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