El sábado pasado en el "Torneo Copar" disputado en Rosario, el atleta paralímpico de nuestra ciudad Pablo Giménez logró mejorar sus marcas en tres disciplinas: lanzamiento de bala (13,95 metros), disco (39,40) y jabalina (36,08). En la primeras trepó al cuarto puesto del ranking mundial 2024 de la categoría F57 y lucha para ganarse un lugar en los Juegos Paralímpicos París 2024, a disputarse del 28 de agosto al 8 de septiembre. En Tokio 2020 logró un diploma por su octavo puesto en bala y además finalizó noveno en jabalina, pero luego de su actuación en Rosario su sueño de alcanzar una medalla paralímpica está más vivo que nunca.
Amputado en su pierna izquierda debajo de la rodilla a raíz de un accidente de tránsito en 2008, llegó al atletismo en 2018 y en solo cinco años representó a Argentina en dos Juegos Parapanamericanos (Lima 2019 y Santiago 2023), en los Juegos Paralímpicos (Tokio 2020) y en un Mundial (París 2023). Con 40 años considera que todavía tiene metas por cumplir en el atletismo y en una entrevista con LA OPINION dejó una frase: "Nunca es tarde, no importa qué discapacidad tengas o qué problema tuviste en tu vida, hay que mirar para adelante, la vida es otra cosa".
-El sábado viajaste a Rosario buscando mejorar tus marcas y lo lograste en las tres pruebas, ¿cómo te sentiste en el "Torneo Copar"?
-La verdad que contento porque venía trabajando bien, le pude agarrar la mano a los entrenamientos, antes estaba pasado de entrenamientos, siempre con muchas cargas y llegaba a los torneos cansado, dolorido; este año mejoré en ese sentido y pude competir bien en Rosario y superar mis marcas. Es un logro muy importante porque hoy llego a un torneo sin dolor, sin molestias en los deltoides, para un atleta es muy importante llegar a una competencia bien y tuve la suerte de poder mejorar las marcas en bala que me estaba costando, de lanzar 12,30, 12,40 ó 12,60, salté a 13,95 metros, una marca que me posiciona muy bien en el ranking mundial. En disco había lanzado 38,09 en el torneo anterior pero por un error de los jueces me pusieron 31 metros y en Rosario lancé 39,40, que para mí es mucho.
-En tus primeros años en el atletismo lanzabas bala y jabalina y luego sumaste el disco
-Sí, con el lanzamiento del disco empecé hace solo un año, fue por un juego con mi hijo Ciro, más que nada desafiándonos entre nosotros y la verdad que quedar posicionado número 4 en el mundo me pone muy contento. Y en jabalina, tenía 34 metros, la marca que hice en los Juegos Parapanamericanos de Santiago 2023 y en Rosario tiré 36,08. El 15 de junio se realizará un torneo en el Parque Roca, así que voy a ir a mejorar esa marca también.
-Con 40 años te seguís superando y estás logrando tu mejor rendimiento
-No puedo creer estar a la altura de los pibes de 17 o 18 años, la verdad que para mí es un logro muy importante, más allá de competir y poder mejorar siempre digo que uno tiene que estar a pleno siempre, porque no sabés que te toca mañana, entonces tenés que estar preparado.
-Con las marcas que lograste en Rosario, ¿crecieron tus chances de volver a estar en un Juego Paralímpico? ¿Cómo se define la clasificación?
-Mi objetivo es volver a vivir un Juego Paralímpico, para mí sería un logro muy importante, pero ya no depende solo de mí, sino de los cupos y las plazas que le den a Argentina, ojalá pueda estar y representar a mi ciudad y a Argentina. No sabemos cuándo se definirá, te llaman por teléfono y ahí te enterás. Sé que en algún momento el celular va a sonar y la alegría será enorme. Ahora estoy enfocado en poder estar arriba de los 14 metros en bala en el próximo torneo, marca que me posicionaría para poder ir a pelear una medalla a París.
-¿Cómo es tu preparación, tu rutina en un día de entrenamiento para estar en el nivel que pudiste plasmar en Rosario?
-Arranco temprano, después de llevar a mi hijo al colegio voy al gimnasio, estoy entrenando en ATP con Marcelo Apesteguía, la verdad que me ayudó mucho, estos resultados se lo quiero dedicar a él porque me dio una mano muy importante. Y después, a media mañana vuelvo a mi casa, realizó trabajos con bandas elásticas y con pelotas y a la tarde entreno lanzamientos en un terreno (Savio y Matheu) en la esquina de mi casa con la ayuda de mi hijo que me da una mano muy grande, estoy donde estoy gracias a él que está bancándome siempre junto a mi mujer.
-¿Contás con alguna ayuda económica o beca para poder dedicarle todo el tiempo al deporte?
-Sí, tengo la beca que me da la Secretaría de Deportes y el Enard, no es una beca muy grande pero no hay que mirar el vaso vacío, siempre digo que toda ayuda es bienvenida, me da la fuerza para seguir adelante, porque como siempre le digo a mis hijos, yo no estoy por una beca sino por la gloria.
-Estuviste en un Juego Paralímpico, en dos Parapanamericanos y en un Mundial, ¿te imaginabas llegar tan lejos cuando arrancaste?
-No y muchos me preguntan ¿Pablo, ya cumpliste tu sueño? No, mi sueño es poder tener una medalla paralímpica y después de eso sí, sueño cumplido. Y para más adelante tengo la idea de entrenar a chicos con discapacidad o convencionales. Ya tengo 40 años y trato de disfrutar todo el tiempo y hacer las cosas al máximo.
-En el caso de llegar a París 2024, este podría ser tu último año como deportista de elite o tenés ganas de seguir unos años más?
-Pienso que hasta 2027 puedo seguir compitiendo, dentro de tres años estarán los Juegos Parapanamericanos en Lima, pero ahora estoy con la cabeza en el torneo del mes que viene en Buenos Aires, pongo todas las fichas ahí.
-Hacés tres pruebas de lanzamientos, ¿cuál te gusta más?
-La que más me gusta es bala y después el disco, ver volar el disco me llena, pero en bala estoy ahí nomás, sé que lo voy a lograr. Los mejores del mundo están tirando 15 metros y logrando 14,20 estaría peleando, no me falta mucho, es nada, pero hay que entrenar para ese nada y ojalá que se pueda dar y que ese nada signifique mucho.
-En 2021 participaste de los Juegos Paralímpicos de Tokio, ¿cómo los viviste?
-Estaba nervioso porque eran mis primeros Juegos, pero los disfruté al máximo, absorbí experiencias de varios rivales para buscar mejorar, soy muy observador, miro mucho, y cuando llegué a Argentina traté de corregir muchas cosas que gracias a Dios hoy se ven reflejadas en los torneos. Finalicé octavo en bala y noveno en jabalina y vamos por más ahora, por cómo venimos entrenando vamos a dar un zarpazo.
-Toda esa experiencia acumulada te está jugando a favor
-Hoy me tomo los entrenamientos con otra tranquilidad. Antes estaba muy acelerado, quería hacer todo ya, vivía muy cronometrado, para el gimnasio, para comer, para descansar, ahora la cabeza me trabaja de otra manera, estoy más tranquilo, antes no lo disfrutaba y ahora sí. Disfruto estar con mi hijo, llevarlo a mis entrenamientos y compartir tiempo con él, eso también me abrió mucho la cabeza.
-¿Te considerás un ejemplo para otros, un espejo para los que vienen atrás?
-No, no sé si un ejemplo, yo hice las cosas porque me salen del corazón, nunca lo hice ni lo voy a hacer para que me tomen como ejemplo. Era mi vida y tenía que salir adelante como persona, como papá, yo no puedo dejar que mi hijo me vea tirado en una cama sin levantarme. Y muchos me han dicho "Pablo yo empecé a hacer deporte por vos" y la verdad que no lo puedo creer. Hay gente que me para en la calle y me pide una foto y pienso que fui útil en esta vida, un ejemplo para personas que decían "tengo más de 40 años, ya no puedo hacer deporte". Soy un loco, pero mi locura contagia. Siempre me gustó el deporte, toda la vida hice fútbol y mi idea era llegar jugando al fútbol y llegué con el atletismo, no se dio la idea inicial pero de alguna manera la vida me fue llevando y encontré esto, ver a chicos con distintas patologías ponerse la celeste y blanca es increíble, la alegría no me entra en el pecho.
-Meses atrás lanzaste una colecta para comprar la prótesis deportiva que nunca tuviste, ¿cómo marcha esa iniciativa?
-Sí, la verdad que estamos luchando con el tema de la colecta, no hemos juntado mucho, son 300 mil pesos y rogando que no se dispare el dólar porque si no la prótesis sería inalcanzable, vale 11 mil dólares. Estoy muy lejos y la verdad que estaría bueno que la gente se sume a la colecta, pueden hacerlo a través de mis redes sociales en Facebook, Instagram y Tik Tok. El alias es Pablo Damián Giménez del Banco Nación, así que todos los que se quieran sumar serán bienvenidos.