Las empresas de transporte de pasajeros del interior de la provincia de Buenos Aires se mantienen en alerta tras el anuncio de las medidas económicas por parte del Gobierno nacional. En La Nueva Perla el panorama es complejo dado que todavía no se terminaron de pagar los salarios de este mes y resta el depósito de los aguinaldos para los empleados de la compañía que tiene la concesión del servicio de colectivos en Pergamino.
Asimismo, las readecuaciones de los subsidios planteadas a partir de enero por el Ministerio de Economía provocan una mayor incertidumbre en la empresa, pero también entre el público usuario, que ya viene de afrontar una suba del boleto en las últimas semanas y en menos de un año, a nivel local, el pasaje pasó de 90 a 375 pesos a raíz de la inflación que no da tregua.
"Estamos en una situación de extrema gravedad. No tenemos compensaciones, ni tarifa ni interlocutor a nivel nacional con quien poder hablar específicamente de temas vinculados al transporte pero mientras tanto hay que seguir cargando combustible, hay que seguir pagando salarios; y por eso decimos que la situación es muy preocupante y no avizoro una salida en lo inmediato", señaló Alfredo González, titular de la empresa La Nueva Perla.
Tarifas desactualizadas
El referente de la concesionara de transporte en Pergamino aseguró que las tarifas que entraron en vigencia hace unas semanas quedaron lejos de los costos que tienen por delante, "por ello necesitamos volver a juntarnos de manera urgente con autoridades de la Municipalidad y los concejales para que, por lo menos, nos den la actualización que había prevista para enero, es decir que entre lunes y miércoles podamos tener un nuevo boleto de 500 pesos, aunque sabemos que los temas administrativos siempre resultan ser una demora", reconoció González, reiterando que necesitan de "manera urgente" subir el precio de los pasajes.
-¿Cómo están haciendo frente a estos aumentos recientes y qué esperan por parte de las autoridades?
- En menos de dos meses el gasoil subió el 66 por ciento; y los salarios, de acuerdo a las paritarias, tuvieron un incremento de cuatro millones por mes para La Nueva Perla por mes, es decir 12 millones en los últimos 90 días.
Para dejar más en claro, en combustible estamos teniendo un gasto de ocho millones de pesos más por mes y estamos frente a un panorama devastador porque no tenemos los precios de cubiertas ni repuestos que se cambian periódicamente en los micros que están en las calles de Pergamino.
-Si bien solicitan de manera urgente adelantar la tarifa de 500 pesos prevista para el mes que viene, ¿qué pasará a partir de enero?
- No lo sabemos. Hay una incertidumbre total y nadie sabe nada, ni siquiera cómo serán los subsidios a las empresas del interior y cuándo llegarán las compensaciones porque nadie tiene certezas.
Por eso dejamos en claro que luego de esta devaluación es prioritario definir qué precio tendrá el boleto a partir del 1º de enero, todo subió de manera extraordinaria y quizás ni un pasaje de 700 pesos esté cubriendo mínimamente los costos que tenemos para salir a las calles con los micros.
Estamos sacando cuentas todos los días, los precios que nos llegan son terroríficos para nuestra empresa y cada vez es más oscuro el panorama.
-¿Cómo están con los salarios de los empleados de La Nueva Perla?
-Estamos viendo que nos acrediten los subsidios atrasados para poder completar el pago de los sueldos de los empleados, les debemos un 35 por ciento de los salarios a nuestra gente y ahora se nos vienen los aguinaldos, algo que en estos momentos es imposible de hacer frente.
En relación a esto, y de acuerdo a lo que venimos hablando con los colegas de la región, no sabemos si la quita de los subsidios será total o parcial. Esta información no llegó en forma oficial, ni a nosotros ni a las autoridades de la Provincia.
Preocupación total
El tema, para Alfredo González., pasa por el hecho de que "no se sabe si el usuario podrá pagarlo, porque el empresario puede pedir lo que quiera, pero la realidad es que a la gente no le dará el bolsillo para semejante erogación. De todos modos, creo que tenemos que esperar a ver qué sucede, pero lo único real es que al tener menos gente arriba de los colectivos porque no podrán pagar el boleto, al afrontar el costo del mantenimiento de las unidades, se sumará el hecho de tener que cumplir por sobre todas las cosas con los trabajadores y, de hecho, las empresas ya lo vienen haciendo".
Los empresarios del transporte sin embargo no pierden las esperanzas de que los subsidios no se corten totalmente para "el interior del interior" y que los recortes se centralicen en el Area Metropolitana de Buenos Aires, que han sido los históricos beneficiarios, como tampoco que se corte el subsidio del boleto estudiantil. "Hay que esperar las medidas y las consecuencias", consideró González con suma preocupación por la situación que se está viviendo en este sector, que además en sus trabajadores, tiene correlato directo sobre el funcionamiento de toda la comunidad.