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Ayer se reunieron Alfonso Prat Gay (Hacienda y Finanzas), Rogelio Frigerio (Interior), Francisco Cabrera (Desarrollo y Producción) y Guillermo Dietrich (Transporte); analizaron los cambios impositivos, la estrategia con los fondos buitre y el mercado cambiario.
Buenos Aires, (NA) - La llegada de Mauricio Macri a la Casa Rosada representará un giro de 180 grados en la política económica, como anticipan los nombres elegidos para su equipo ministerial de claro sesgo favorable a los mercados, que en lo inmediato tendrán desafíos clave: cepo cambiario, impuesto a las Ganancias y retenciones a las exportaciones.
Tras el anuncio realizado en la sede del Gobierno porteño en Parque Patricios, los funcionarios del gabinete económico mantuvieron una extensa reunión para empezar a delinear el paquete de medidas económicas que Macri comunicará apenas asuma el 10 de diciembre.
En esta primera reunión de gabinete -habitual en el Gobierno porteño- analizaron los cambios impositivos, la estrategia con los fondos buitre que se iniciará recién en 2016 y el punto más importante es el vinculado con la situación del mercado cambiario.
Allí, y por cuatro horas, se reunieron: Alfonso Prat Gay (Hacienda y Finanzas), Rogelio Frigerio (Interior), Francisco Cabrera (Desarrollo y Producción) y Guillermo Dietrich (Transporte).
Uno de los temas fue la posibilidad de enviar un proyecto al Congreso para levantar la denominada ley cerrojo, que permita iniciar una negociación con los fondos buitre, un tema que también consideran crucial entre los economistas del gabinete macrista.
Esta semana, la consultora Moody´s elevó la nota de la deuda argentina ante la posibilidad de que el nuevo gobierno avance en las negociaciones con los fondos buitre, que podría permitir la llegada de capitales.
A este respecto, quien encabezará las negociaciones será el designado secretario de Finanzas, Luis Caputo.
Otros proyectos que se están elaborando se vinculan con una promesa electoral de Macri: modificar el impuesto a las Ganancias para afectar a la menor cantidad de trabajadores posibles.
Sobre retenciones, el ministro de Agricultura elegido por Macri, el radical Ricardo Buryaile, ratificó que serán levantadas las aplicadas a las economías regionales, al trigo y el maíz y en forma parcial a la soja.
En el Gobierno estiman que los ruralistas tienen alrededor de 5.000 millones de dólares en soja sin liquidar y que ese volumen daría oxígeno a las arcas oficiales.
Dos programas que siguen
El ingreso de estos dólares es clave para levantar el cepo cambiario y evitar una devaluación que termine impactando en los precios.
Desde el futuro gobierno ya adelantaron que continuarán los dos programas Ahora 12 y Precios Cuidados, dos iniciativas que favorecieron el crecimiento del consumo.
Fuera de las promesas y proyectos, Macri aseguró que en enero viajará a Suiza al Foro Económico Mundial que se realiza en la ciudad de Davos, donde se reúnen los presidentes de las potencias mundiales, financistas e inversionistas.
“Seguramente vamos a ir a Davos en enero, porque ahí encontrás mucha gente en un solo lugar”, afirmó el mandatario electo, en declaraciones televisivas.
Sobre los primeros pasos en la relación Gobierno nacional y Provincias, Frigerio adelantó que “tenemos un doble objetivo, generar condiciones de desarrollo social, y que tenga un equilibrio federal”.
“La Argentina no tiene futuro en el país unitario en el que se transformó. Tenemos que generar, con medidas concretas, ese federalismo homogéneo y equilibrado de todo el territorio nacional”, sostuvo.
Otra de las definiciones vinculadas con la esfera económica es la designación de Carlos Melconian al frente del Banco Nación.
El economista, uno de los principales asesores de Macri, sostuvo: “Voy a estar al frente de una entidad que me he dado cuenta la capacidad de llegada que tiene con el solo nombramiento; desde ese lugar voy a trabajar”.
