El aumento en el precio de la carne vacuna y la caída del poder adquisitivo impactaron profundamente sobre el consumo en la Argentina. Pergamino no es la excepción ya que la baja en el consumo se observa desde hace varios meses de manera progresiva.
El consumo de carne vacuna es el más bajo de la historia. En un contexto de alta inflación, aumento de la pobreza y salarios desfasados hacia abajo, el Gobierno implementó el cierre a las exportaciones de ese producto. La "baja" de la demanda, sin embargo, no calmó los precios.
De acuerdo con lo que consigna el portal digital El Economista "entre 2018 y 2019, la caída de los ingresos en términos reales generó que el consumo per cápita de carne vacuna se ubique en los más bajos de toda la serie que lleva el relevamiento de la Cámara de la Industria y el Comercio de Carnes (Ciccra) con 50,8 kg/año. La pandemia y la consecuente reducción en los ingresos agravó más este panorama, llevándolo a 48,8 kg/año".
Panorama local
De acuerdo con lo expuesto por carniceros locales entrevistados, todos con años detrás del mostrador no solo despachando sino escuchando a los vecinos, la principal causa que ellos advierten para explicar la baja en el consumo está dada por la reducción del poder adquisitivo de la gente. Además entienden que los incrementos de la carne se dan en un contexto de alta inflación, donde todo aumenta: la indumentaria, el transporte, los servicios, por lo que las familias hacen recortes y adecuaciones en todos sus gastos.
Esto genera que no todas las personas tengan las posibilidades de acceder a la carne vacuna, por ende se modificaron los hábitos alimentarios y así se opta por el cerdo o el pollo. Es decir que lo que los vendedores no consideran que se trate de una mutación de los hábitos alimentarios por el auge del veganismo sino que la abrupta caída se la adjudican directamente a la crisis económica.
Los cortes de pulpas comunes son los más elegidos por los consumidores y el asado se convirtió en un privilegio de pocos.
A esta reacción del mercado consumidor se suma la preocupación de los carniceros, que se ven directamente afectados y han quedado fuera de las políticas oficiales porque los cortes a precios populares solo los pueden comercializar las grandes cadenas de supermercados, no llegando de esta manera a los comercios de proximidad de los barrios pergaminenses.
Movimiento de precios
En nuestra ciudad, la Cámara de Alimentarios realiza mensualmente un índice de precios que permite advertir el movimiento de los mismos en diferentes productos. Considerando dicha estadísticas se comprueba que la carne, durante el primer semestre de este año tuvo un incremento del 29, 7 por ciento en las carnicerías de proximidad, siendo los meses de mayor inflación marzo y abril con 9,3 y 7 por ciento respectivamente mientras que, en los grandes supermercados el valor de la carne vacuna se incrementó en un 40 por ciento siendo enero y marzo los meses en que mayor se notó esta modificación (un 13,7 por ciento).
Gestiones sin éxito
La entidad pergaminense, que conduce Nelson Figueredo, ha realizado numerosas gestiones ante la Secretaría de Comercio para ser incluidos en los cortes vacunos a precios populares pero no han tenido éxito.
En contacto con LA OPINION, Figueredo indicó la última reunión fue el jueves pasado con la secretaria de Comercio, Paula Español, en el marco de un encuentro de Intercámara de Consumo Masivo que representa a más de 100.000 comercios en todo el país. En esa oportunidad se dialogó sobre los cortes cárnicos a precios populares teniendo en cuenta que el Gobierno hizo un convenio solo con las cadenas de supermercados multinacionales sin contemplar a los comercios de proximidad. "Desde Intercámaras le ofrecimos a la Secretaría de Comercio nuestro apoyo para llegar con este beneficio a todos los rincones del país, si es que ellos tienen la intención de que los cortes a precios populares lleguen a las personas que más lo necesitan, muchas de las cuales no pueden llegar hasta los supermercados. En este marco consideramos que los frigoríficos exportadores vendan a las carnicerías tradicionales a menor costo para que los carniceros de proximidad puedan ser incluidos en este beneficio".
"Nos dejaron afuera una vez más de los beneficios", sintetizó Figueredo el resultado del encuentro, pero el dirigente no desiste: "Estoy enviando, a nombre de la Cámara de Alimentarios de Pergamino, una carta documento a la Secretaría de Comercio para que nos tengan en cuenta en una próxima reunión que se realice sobre los cortes populares porque estamos defendiendo a los carniceros tradicionales".
El entrevistado coincide con los carniceros y argumenta que la baja récord de consume no se debe a nuevos hábitos alimentarios ni a la apertura o cierre de las exportaciones: "Esto se da por la baja en el poder adquisitivo que registran los trabajadores".
Desleal y peligroso
Por otro lado, Figueredo se refirió a la venta de carne que se ha generado a través de redes sociales, a precios muy bajos. "Notamos que hay venta de carne por Facebook y es un tema que amerita tratamiento incluso con las autoridades, porque una carnicería para ser formal debe pagar alrededor de 25.000 pesos para tener todo en regla mientras que una persona particular ofrece en su Facebook carne a bajos precios que no solo está generando una competencia desleal con el comerciante sino que quizá no cumpla con las mínimas condiciones bromatológicas requeridas. No sabemos y no queremos juzgar pero si es competencia desleal no la podemos permitir. Alertados por esta situación es que la Cámara, como acción gremial, va a reclamar a las autoridades esta situación", señaló el presidente de la entidad local.
Gonzalo Bejarano: "Los precios suben mucho pero bajan muy poco, centavos"
Gonzalo Bejarano es el carnicero en un supermercado chino ubicado en la zona céntrica de nuestra ciudad. En contacto con LA OPINION, el comerciante aseguró que el consumo de carne vacuna cayó mucho por el aumento de los precios. "En noviembre y diciembre pasado se registró una suba del 40 por ciento del valor de la carne. Es un comportamiento del mercado que se viene dando hace mucho, que en la finalización del año se registra un incremento desmedido lo que provoca la caída del consumo ya que aumenta la carne pero no así los sueldos. Consecuentemente se advierte una caída del poder adquisitivo que se traduce en las limitaciones a la hora de comprar. Esto se nota porque la gente que compraba un kilo de churrasco cada día ahora compra mucho menos, quien te compraba cinco kilos de asado ahora compra la mitad". En este mismo sentido destacó que la actitud del consumidor cambió, aunque no todos en la misma proporción: "Recibo a clientes de buen poder adquisitivo y el consumo de carne en este sector de la sociedad no ha variado tanto pero sí en la clase media trabajadora, los jubilados que, en este caso no resignaron la calidad de la carne pero sí la cantidad que consumen". Bejarano contrasta la disminución en la compra de carne vacuna con el aumento de la demanda de carnes de cerdo y pollo: "Cuando se compra para hacer un asado que ya no es todo de carne vacuna sino que se combina con cerdo, la gente por ejemplo lleva dos kilos de asado de vaca y dos de cerdo y así achica alrededor de 700 pesos con lo que compra la ensalada, el pan, la gaseosa y el carbón", analiza.
Achicando márgenes
Manifestando que debe resignar parte de su ganancia para que no disminuya la venta, Bejarano contó cada aumento que reciben de parte de sus proveedores, no pueden trasladarlo al 100 por ciento al cliente: "Resignamos rentabilidad porque entendemos que si no bajarán aun más las ventas ya que los incrementos son constantes y en todos los productos".
La baja en el consumo obliga a los comerciantes a rever la cantidad de stock que deben tener. Al respecto el comerciante señaló va regulando los pedidos a los proveedores, según el comportamiento de su clientela. En promedio, aunque los fines de semana se vende un poco más, se están "bajando" menos kilos por semana. "Debemos ser cautelosos con el stock que tenemos".
Bejarano señala que cando se anuncia que bajan los precios, siempre son centavos y que las subas, en cambio, son notorias: "Decir que los precios bajan es mentira y así se genera falsa expectativa en la gente".
Gabriela Fromaget: "La carne pasó a ser un lujo en la mesa de los argentinos"
Gabriela Fromaget es carnicera y también forma parte de la comisión directiva de la Cámara de Alimentarios.
En diálogo con el Diario no dudó en afirmar que "la carne pasó a ser un producto de lujo en la mesa de los argentinos sobre todo en tiempos de pandemia donde el poder adquisitivo se desvalorizó, donde mucha gente ha quedado sin trabajo". Según su visión, siendo comerciante del rubro desde hace décadas, "los consumos han bajado a niveles históricos ya que ni siquiera se come la cantidad necesaria de carne promedio. La mayor parte de la gente no puede acceder a comer carne todos los días ya que el kilo tiene un costo de 800 promedio". Por esta razón es que al momento de comprar, los clientes optan por los cortes más baratos como picada, caracú, los cortes de olla mientras que el asado se convirtió en algo más esporádico. "El que compraba antes el asado el fin de semana ahora lo hace una o dos veces por mes. Además aumentó el consumo de pollo y cerdo, son alternativas que la gente tiene a mano ante la imposibilidad de acceder a la carne vacuna", dijo Fromaget.
Además de la elección de otro tipo de carne se modificó la compra en cantidades: "Antes se compraba de a kilos y ahora se compra en plata, por ejemplo, 100 pesos de carne picada. Mis negocios están ubicados en diferentes barrios y se nota mucho la depreciación del poder adquisitivo. Es muy triste". Esta situación obliga a los carniceros a calcular cuánto es el stock con que deben contar: "Hacemos una especie de estudio de mercado y calculamos la bajada de carne que es un producto fresco, perecedero. Ya sabemos que a principios de mes se consume un poquito más que después del 10".
De acuerdo con lo expuesto por la entrevistada, "el precio de la carne venía tranquilo, se registraban aumentos poco significativos pero con el paro del campo en vez de bajar subió, hizo un efecto rebote. En las últimas semana bajó pero poco y a mi criterio se debe a que no hay demanda. A esto se suma que del productor al carnicero la carne llega carísima sobre todo en Pergamino que no tenemos planta faenadora".
Enojados con el Gobierno
Sobre los precios populares en cortes de carne, la referente del sector indicó: "Los carniceros de proximidad estamos muy enojados con el tema de los cortes populares que solo se venden en las grandes superficies. Las carnicerías tradicionales, de proximidad, quedamos afuera de este beneficio ya que la Secretaría de Comercio negoció con las grandes cadenas de supermercados a la que tienen acceso las personas de una clase o nivel social, quienes viven en el barrio no pueden muchas veces llegarse hasta los supermercados a comprar carne a precio popular".
Ceder rentabilidad
Con el afán de no perder clientela, los carniceros aplican estrategias que les permiten subsistir. "Estamos cediendo nuestra rentabilidad, haciendo un esfuerzo terrible porque no podemos aplicar los aumentos al 100 por ciento ya que entendemos que a la gente no le alcanza", manifestó Fromaget. Y añadió: "Estamos buscando la forma de poder sobrevivir, entonces ofrecemos en las carnicerías otro tipo de productos, milanesas ya elaboradas, especias, fiambres, como para salvar los gastos diarios. En mi caso decidimos incorporar productos de almacén, enlatados, salsas, le vamos buscando la vuelta para no tener que bajar las persianas porque los gastos fijos, que incluye el pago de los servicios, son agobiantes".
Sin buenas expectativas
El apellido Fromaget es muy representativo en el rubro de la carne en Pergamino. Gabriela proviene de familia que ha hecho historia en el rubro a nivel local y puede cotejar de primera mano cómo reacciona el público consumidor: "Soy testigo vivencial de cómo la gente ha cambiado sus gustos, de cómo el rubro se fue moviendo y es muy preocupante no ver un futuro promisorio. No advierto un pronóstico muy alentador en cuanto a la reactivación del consumo de la carne".