La seguridad vial en todos los casos es un conjunto integral de medidas, normativas y acciones preventivas orientadas a minimizar el riesgo de accidentes, lesiones y muertes en las vías de tránsito. Esta disciplina abarca tanto la infraestructura vial como la educación, la normativa y la concientización social. En el contexto de los accesos a la ciudad, la seguridad vial puede ser significativamente mejorada mediante la colaboración activa de todos los actores involucrados en la sociedad, tales como el Municipio y la ciudadanía en general acatando las normativas, tanto en el rol de peatones como así también cuando se conduce un vehículo.
Inspección General y Tránsito desempeñará un papel fundamental en la creación de políticas públicas eficaces, en la implementación de infraestructuras viales adecuadas y en la promoción de campañas educativas que fomenten el respeto por las normas de tránsito, tal como lo viene haciendo la Municipalidad en redes sociales y en todos los medios de comunicación de la ciudad. Además, es esencial la puesta en marcha de obras que pueden aportar innovaciones tecnológicas, mejorar el diseño de los ingresos y apoyar las iniciativas de responsabilidad para que los conductores respeten las señales de tránsito, fundamentalmente los límites máximos de velocidad.
De esta manera, una estrategia de seguridad vial eficaz en los accesos a la ciudad no solo depende de la infraestructura o de la autoridad, sino que requiere un esfuerzo conjunto que involucre a todos los sectores sociales para garantizar un tránsito más seguro, fluido y responsable.
Medidas concretas
"Estamos avanzando en las intervenciones en los accesos a la ciudad, especialmente en áreas claves, como la zona donde ocurrió el accidente del menor de edad en la avenida Rodríguez Jáuregui", explicó el subsecretario de Inspección General y Tránsito en una entrevista con LA OPINION. "Este es un tema que veníamos planteando y resultará fundamental que todos los accesos estén correctamente intervenidos para garantizar la seguridad de quienes ingresan a Pergamino. La gente que entra a la ciudad necesita hacerlo a una velocidad reducida, por eso es necesario implementar limitadores de altura, reductores de velocidad y demás medidas de seguridad. Aunque al principio nos costará, con el paso de los días los automovilistas tomarán conciencia para evitar este tipo de situaciones como la que padecimos recientemente; debo agradecer el respaldo del Municipio ya que estamos comenzando a trabajar en ello para que se vean los cambios lo más rápido posible", agregó el funcionario mientras mostraba los planos que se fueron desarrollando para concretar estas intervenciones.
- ¿Ya están abocándose a este plan y han diagramado la puesta en marcha?
- Ayer (por el viernes) estuve en la zona de Quina Mastrángelo, y estamos planificando la instalación de reductores de velocidad, además de mejorar los carteles para que la información sea clara y visible. También estamos evaluando la posibilidad de modificar el radar de control de velocidad.
Por otra parte, estoy considerando la incorporación de guarda raíles en las cunetas y pozos que carecen de protección, una medida que propusimos y se tomó en cuenta para seguir con estas acciones preventivas. Sin embargo, y siempre trabajando en equipo con directivas claras, estamos listos para comenzar a abordar los temas de manera efectiva. Asimismo, y en cuanto a las medidas de seguridad vial, se están implementando diversas acciones a lo largo de la ciudad, especialmente en los puntos de acceso, con el objetivo de mejorar la seguridad para todos los conductores y peatones.
Velocidad máxima
El exceso de la velocidad es una de las principales razones por las cuales se producen siniestros viales con consecuencias muy graves para los ocupantes del vehículo y los peatones. Una velocidad elevada no permite maniobrar a tiempo ni evitar el impacto contra otros vehículos u objetos. Una velocidad excesiva deja sin efecto otros sistemas de protección como por ejemplo el cinturón de seguridad o air bag.
La velocidad debe ser adecuada a las circunstancias y a la vía por la que circulamos. La legislación establece que en zona urbana la velocidad máxima en calles es de 40 km/h. y en avenidas 60 km/h. En rutas es de 110 km /h. para autos, camionetas y motos; de 90 km/h para microbús, ómnibus y casas rodantes motorizadas; de 80/h para camiones y automotores con casa rodante acoplada.
Asimismo, en semi autopistas es de 120 km/h para motocicletas y automóviles; de 110 km/h para camionetas; de 90 km/h para microbús, ómnibus y casas rodantes motorizadas; de 80km/h para camiones y automotores con casa rodante acoplada. En autopistas la máxima permitida es de 130 km/h para autos y motos; de 110 km/h para camionetas; de 100 km/h para microbús, ómnibus y casas rodantes motorizadas y 80 km/h para camiones y automotores con casa rodante acoplada. "Se deben respetar siempre los límites máximos y adecuar la marcha del vehículo a las condiciones de la vía y del ambiente", resaltaron las autoridades locales.
Límites especiales
En las encrucijadas urbanas sin semáforo: la velocidad precautoria, nunca superior a 30 km/h; en los pasos a nivel sin barrera ni semáforos: la velocidad precautoria no superior a 20 km/h y después de asegurarse el conductor que no viene un tren; en proximidad de establecimientos escolares, deportivos y de gran afluencia de personas: velocidad precautoria no mayor a 20 km/h, durante su funcionamiento; en rutas que atraviesen zonas urbanas, 60 km/h, salvo señalización en contrario.
Mínimos: en zona urbana y autopistas: la mitad del máximo fijado para cada tipo de vía; y en caminos y semi autopistas: 40 km/h, salvo los vehículos que deban portar permisos, y las maquinarias especiales. Además se considera señalizados aquellos que establezca la autoridad del tránsito en los sectores del camino en los que así lo aconseje la seguridad y fluidez de la circulación.