El órgano de la Iglesia Merced será restaurado en su totalidad

"¿Qué es el órgano? Un instrumento de viento de dimensiones considerables. Por el espacio que ocupa y por la extensión de su gama sonora, se le compara a una gran orquesta, con la ventaja de que su manejo lo verifica un solo ejecutante", informaban en la publicación Noticias de Nuestra Iglesia Parroquial del año 1930.

"La legislación eclesiástica asigna al órgano tres oficios en la liturgia: acompañar la música sagrada, suplir el canto de algunas piezas y llenar los silencios.

"Ha sido llamado con justicia el rey de los instrumentos, por su severidad, su grandeza, su majestuosa nobleza. Su voz es de plegaria dulce, esperanza serena, no es el aullido de los combatientes, sino el piadoso lamento de los que creen y esperan", refería.

Nuestra Parroquia tuvo su primer órgano el 20 de junio de 1906, adquirido con el aporte de los fieles. Incendiado el templo en el año 1919, quedó totalmente destruido. Junto con el nuevo templo, nació en el Padre Amondarain la idea de dotarlo cuanto antes de este instrumento tan necesario.

El entonces párroco de La Merced viajó especialmente a Alemania para concretar la compra del órgano con las dimensiones del templo. Por lo tanto fue construido específicamente respetando los planos de donde iba a ser instalado.

Es así que el 14 de enero de 1938 se firmó un convenio entre el Padre Amondarain y José Wollmer, representante de la casa Walcker y Cía. Para colocar un órgano, cuyo presupuesto ascendía a la suma de $22.800.

El 25 de octubre de ese mismo año el órgano llegó en tren a Pergamino en 16 cajones, con nueve toneladas de peso. Y el 8 de diciembre se inauguró y se bendijo el instrumento.

A 85 años de aquel trascendente capítulo en la historia de Pergamino y de la Parroquia La Merced, este imponente y mágico instrumento –orgullo de la ciudad, por ser uno de los más importantes en la Provincia- necesita una profunda restauración y afinación. 

"No solamente es un instrumento sino que es una obra de ingeniería, -aseguró a LA OPINION el Dr. Maximiliano Runco uno de los impulsores del proyecto y ejecutor del instrumento-. Si bien decimos que es aerófono eso significa que hay un sistema de aire que hace sonar unos tubos, pero para que esto suceda hace falta un sistema de fuelles y para que el fuelle funcione hace falta un ventilador que impulse aire. Son tres fuelles con presiones distintas que tienen que estar regulados correctamente para brindar la cantidad de aire que necesita cada uno de los tubos. Hay tubos chiquitos, de dos o tres centímetros, y gigantes, que miden hasta cinco metros –precisó-. Es un sistema muy complejo y la activación de cada tubo exige un sistema eléctrico muy detallado que es activado en primer punto con la tecla que uno presiona, pero también en función del grupo de tubos que uno quiere que suene, entiéndase los instrumentos con los cuales cuenta el órgano. Es una gran orquesta en donde hay instrumentos de diferente color, intensidad y sonido, que se van conjugando de acuerdo a las obras que se quieren tocar. Por lo tanto, hay instrumentos que le corresponden al primer teclado o primer manual, otro del segundo teclado o segundo manual y otro que le corresponde a la pedalera. Esto significa que hay otro juego de notas que se tocan con los pies, son dos octavas de notas y cada octava tiene doce teclas. Por lo tanto, tenés tres líneas sonoras distintas y las tres con instrumentos diferentes. Esto te convierte en artífice de una orquesta", definió.

Las restauraciones

El músico, que también integra la agrupación Proyecto Coral como cantante e instrumentista, explicó cuál es el trabajo que se necesita hacer para su óptimo funcionamiento. 

"No es afinar una cuerda o tocar un trasto o un clavijero, sino meterse adentro del instrumento donde hay un sistema de cableado, válvulas, tuberías, cámaras. Por lo tanto es muy complejo el mantenimiento de este instrumento y obviamente tiene que estar realizado por gente especializada. 

"En Argentina no son muchos y el que siempre lo llevó a cabo fue el ingeniero Carlos Merlassino haciendo una restauración cuasi integral en el año 1980, cuando todavía estaba el Padre Gastón Romanello. Se cambiaron un montón de elementos originales de fábrica. Hoy por hoy sigue teniendo muchas cosas que son originales. El sistema eléctrico de todo lo que es la consola, o sea el organizador de esta batería de instrumentos tiene un funcionar un tanto errático porque tiene elementos que tienen 85 años y eso tiene que ser cambiado".

Runco detalló que hace falta una limpieza integral profunda, un sistema de iluminación interno para trabajo y mantenimiento; afinación completa, restauración de válvulas y la renovación completa de la parte eléctrica de la consola.

"Nos contactamos con Organería Argentina donde se encuentra Alejandro Galli, que es uno de los técnicos especializados, que se encargan de hacer mantenimiento de los principales órganos de la Ciudad de Buenos Aires, incluido el órgano del CCK", sostuvo el traumatólogo que elogió el impulso del Padre Miri para la restauración y la difusión de la música de órgano.

"Estos especialistas armaron un presupuesto en base a tres etapas: la primera es la que vamos a enfrentar la semana que viene, antes de las Fiestas Patronales, que es la restauración eléctrica de la consola: limpieza general, iluminación del interior y una afinación básica. La segunda y tercera etapa va a consistir en una limpieza integral de todos los tubos de todos los registros, significa sacar más de 2800 tubos, limpiarlos uno por uno", refirió.

En cuanto a los costos de esta ardua tarea y la recaudación del dinero para llevarla a cabo, Runco explicó que cada etapa cuesta 590 dólares aproximadamente. "A eso hay que agregar algunos extras en caso de que se necesite la reparación de algunas válvulas de los tubos", sostuvo.

"Lo que buscamos y esperamos es concretar este año, al cumplimiento de los 85 años de su instalación, estas tres etapas de restauración. Este es el principal objetivo, pero también tiene que mantenerse porque es un órgano que debe ser controlado dos veces al año por gente capacitada".

Finalmente, Runco sostuvo que "toda colaboración es bienvenida de cualquier empresa, organización o de la comunidad en general. Los interesados deberán contactarse directamente con el Padre Carlos Miri en la secretaría Parroquial".

La intención es también brindar conciertos de música popular 

"Por sus dimensiones se construía en iglesias y se lo asoció mucho al área litúrgica, pero tiene un montón de música no litúrgica. Igualmente, este último tiempo con el Padre Carlos Miri la intención fue brindar conciertos no solo de música clásica sino popular, como hicimos para el 25 de Mayo, para desmitificar el órgano como órgano=iglesia=liturgia=misa, porque no es tan así. Si bien tiene su sentido litúrgico también es un instrumento muy rico para un montón de otros estilos. Y en el común de la gente el órgano está incorporado como un instrumento tétrico que suena en El Fantasma de la ópera", indicó Runco.

"La idea es convocar a más gente e invitar a organistas con experiencia para brindar conciertos diferentes; hacer otros conciertos con grupos corales como lo hicimos con Proyecto Coral e impulsar de cierta manera la convocatoria y que la gente sepa que hay un instrumento que suena y que todos pueden disfrutarlo".