Bajo la consigna de llevar el arte a las calles, hermosear Pergamino y cuidar los espacios públicos, artistas visuales locales intervinieron las garitas de colectivos. El sábado pasado se comenzó la primera etapa donde se conjugarán el arte, lo urbano y lo ambiental. Testimonios de Javier Carrera, Silvia Tunesi, Laura Albano y Graciela Ambrosini.
DE LA REDACCION. La Secretaría General, a través de la Subsecretaría de Cultura, lanzó un proyecto de realizar intervenciones en distintos lugares de la ciudad con la participación de artistas plásticos. Garitas de colectivos y otros espacios de la ciudad albergarán diferentes formas, colores y dibujos.
El sábado comenzó la primera etapa de una serie de intervenciones donde se conjugarán el arte, lo urbano y lo ambiental.
Bajo la consigna de llevar el arte a las calles, hermosear la ciudad y cuidar los espacios públicos, artistas pergaminenses intervinieron las garitas de colectivos de la ciudad.
El subsecretario de Cultura, Raúl Notta, se refirió al programa al explicar que junto con la Secretaría General estamos realizando una política de intervención urbana en la ciudad. Hemos comenzado con artistas plásticos que ya han hecho trabajos en las garitas ubicadas en el bulevar Juan Domingo Perón, en la avenida Hipólito Yrigoyen, en el barrio San Martín y en un ambiente de un sector del barrio Centenario donde estamos recuperando el Parque Municipal.
En este punto, el funcionario aclaró que la Secretaría General implementó una política donde lo ambiental, lo urbano y lo cultural se conjuguen y esto significa crear nuevos escenarios, porque tanto el público como los artistas necesitan nuevos escenarios, salir de los espacios tradicionales para encontrarse con otros espacios como por ejemplo Pergamino Arte Noche, donde los músicos han encontrado otro público que quizás no concurre al Teatro Unión Ferroviaria o la sala de Bellas Artes.
Los artistas que ya han intervenido las garitas con llamativas obras son: Daniel González, Gustavo Baronio, Marcela Cenacchi, Silvia Tunessi, Laura Albano, Sergio Bonzón, Adrián Mastorchio, Javier Carrera, Graciela Ambrosini y Miguel Vecino.
Testimonios
Para el artista visual Javier Carrera fue una excelente idea. En Argentina no es popular el hip hop, pero en muchos países del mundo sí, es una cultura urbana y el graffitti y los murales son parte de ella. Las calles cuentan historias, comentó
Cuando Raúl Notta me mostró cuál era, en ese preciso momento empezó la obra, me encantó que fuera esa, en ese lugar geográfico, con su entorno, el barrio, la gente que pasa a diario y los circos que paran en ese lugar cuando vienen a la ciudad. La verdad tenía muchas ganas de dejar una impronta, agregó.
Al referirse a la forma de trabajo y la técnica aplicada, Carrera explicó: Utilicé técnicas propias del graffitti, stencil y pintura urbana, reafirmando el sentido conceptual y estético de la imagen que quería reflejar. Jugué con la garita en 3d, como si fuera un comix.
El artista contó con dos colaboradoras. Quiero agradecer a Camila Carrera -mi hija- y Marina Villanueva, que me vio y se ofreció a pintar. Ellas fueron claves para la realización y el resultado final de la obra, sostuvo.
Quiero resaltar que apoyo toda gestión que tenga como fin producir espacios para los artistas, más aún cuando son en el espacio público.
Está en los artistas y su capacidad adueñarse de ellos, y aprovechar esa posibilidad de comunicación con la gente, se puede modificar el espacio urbano, contar una historia o dejar un mensaje o pensamiento, concluyó.
Albano-Tunesi
Si bien fueron convocadas en forma separada, las artistas visuales Laura Albano y Silvia Tunesi decidieron trabajar juntas. Tratamos esta intervención urbana como una alegoría -explicaron-. Intentamos hacer visible el concepto que esconde una garita: lugar que entendemos como refugio, espacio de espera, sitio seguro, de resguardo.
Albano, integrante de la Comisión de Plástica de la Casa de la Cultura agregó: Asociamos concepto, color y forma a través de nuestra condición femenina, con niños, rosa, mujer, protección, abrazo materno.
La técnica que utilizamos fue impresión fotográfica sobre acrílico, acotó Tunesi.
Graciela Ambrosini
Para la artista visual y docente Graciela Ambrosini la propuesta de intervenir espacios públicos es una buena idea para ejercitar el diálogo entre la obra del artista y la gente del lugar.
Al referirse a la pintura realizada en la garita que le fue asignada, la docente explicó que si bien tiene que ver con mi obra, la expresión me parece ideal para que no lleve a interpretaciones de ningún tipo, simplemente componer con forma y colores, de eso se trata, algo lúdico y que transmita desde ese juego alguna emoción.
Las garitas son puntos de concurrencia, lugares donde se llega o de donde uno se va. Para algunos es lugar de paso, otros las habitan. Es también un lugar de reunión de desconocidos que se encuentran a diario a una misma hora por miles de motivos. Por qué no tratar de hacerla más cálida a través del arte.
En este punto la artista destacó que al ver la garita intervenida nos damos cuenta que se renovó el paisaje.
Ambrosini, que trabajó junto a sus alumnos de la Escuela de Artes Visuales, contó que mientras pintábamos la gente se acercaba a mirar y algunos agradecían. Esto resultó, al menos para mi, muy gratificante.
La artista agradeció que me llamaran para este proyecto e instó a que continúen con esta convocatoria, porque creo que hace diferente a nuestra ciudad, y al final en la intervención urbana el trabajo del artista convive con la gente.