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Por cumplirse el centenario de la aparición de la Virgen de Fátima, el punto de salida de los peregrinos pergaminenses es la parroquia que lleva el nombre de esa advocación mariana. Este domingo el obispo Hugo Santiago los recibirá en la “Casa de la Madre”.
Este fin de semana se desarrollará la tercera edición de la Peregrinación Diocesana al Santuario de María del Rosario de San Nicolás. También se contabiliza que hace 33 años que se desarrolla la caminata que parte de Pergamino, ciudad de María Crescencia.
Con motivo de celebrarse el centenario de la primera aparición de la Virgen de Fátima, la peregrinación diocesana tendrá su punto de partida en la Parroquia Nuestra Señora de Fátima, J. J. Jiménez 549, a las 6:00 de este sábado.
La llegada a San Nicolás está pautada para este domingo a las 13:00. En el Santuario, el obispo Hugo Santiago los recibirá y presidirá la misa en acción de gracias.
Pueblos
De acuerdo con el cronograma, la llegada a J. A. de la Peña está pautada para las 9:00 de este sábado, allí se descansará por espacio de 45 minutos. A las 12:00 los peregrinos llegarán a Acevedo, tiempo de descanso: una hora. A las 15:00 será la llegada a Guerrico donde se celebrará misa (descanso de una hora). A las 18:00 llegarán a Conesa (descanso 45 minutos). A las 20:45 a Erézcano (descanso de una hora). A las 23:15 llegarán a General Rojo donde pasarán la noche. A las 6:30 saldrán de esa localidad para llegar a Campo Salles a las 8:30 (descanso de 45 minutos). Luego seguirán camino hasta el Parador al que llegarán aproximadamente a las 13:00 para arribar, a las 14:00, al Santuario.
Un poco de historia
Esta será la tercera edición de la Peregrinación Diocesana (que propusiera el exobispo Héctor Cardelli) pero la número 33 desde que comenzaron a realizarse las caminatas con punto de partida en nuestra ciudad.
La iniciativa de realizar las peregrinaciones, desde Pergamino hasta San Nicolás, se dio en la casa de la difunta, doña Elba Bonacalza, que propuso visitar en San Nicolás al párroco fundador de la entonces capilla San Carlos dependiente de la parroquia Nuestra Señora de Luján de Pergamino, padre Carlos Pérez. El objetivo fue conocer mejor el acontecimiento mariano surgido un año antes.
Así una treintena de jóvenes tomó la idea y la puso en práctica, con el apoyo del párroco interino, padre Jorge Galli.
Luego de las primeras peregrinaciones, los 35 miembros se multiplicaron y sobrepasaron el millar lo que fue motivando diversos cambios de organización y ocasionaron la supresión de elementos como el camión que llevaba los bolsos que resultó insuficiente; o las paradas para dormir en Guerrico y en General Rojo, que afectaban la tranquilidad de esos pueblos. También se suprimieron los colectivos para el regreso de los peregrinos.
