Pergamino

Centro Oncológico: la tarea de hacer del anhelado sueño una estructura sustentable


 LA OPINION esta semana recorrió el centro y la obra de infraestructura est prcticamente terminada  (LA OPINION)

'' LA OPINION esta semana recorrió el centro y la obra de infraestructura está prácticamente terminada. (LA OPINION)

La obra de construcción en Liniers y Monteagudo está prácticamente terminada. Se están instalando los equipos. Resta crear la fundación que regirá los destinos de este espacio. La gestión para su instalación en Pergamino fue de la Fundación Leandra Barros y la inversión del Gobierno nacional.


La obra de construcción del Centro Oncológico en la esquina de Liniers y Monteagudo está prácticamente terminada. Lo que hace un tiempo parecía un imposible, cuando la Fundación Leandra Barros desplegaba distintas acciones para adquirir un acelerador lineal que permitiera que pacientes con patologías oncológicas  sin cobertura social realizar sus tratamientos de radioterapia en el Hospital San José, hoy aparece como una realidad superadora de aquel objetivo.  Se trata de la inversión pública en infraestructura en materia de salud  más importante de la historia de la ciudad. Para su emplazamiento en predios que fueron cedidos por la Provincia- pertenecían al Hospital San José- el Gobierno nacional invirtió 234 millones de pesos. Los trabajos fueron ejecutados como parte del Plan Nacional de Medicina Nuclear-la decisión se tomó durante la presidencia de Cristina Kirchner y fue sostenida por la actual gestión de Mauricio Macri-. Los equipos que funcionarán allí para el tratamiento del cáncer se están instalando y la puesta a punto demandará un par de meses. En este escenario el gran desafío ahora es dotarlo de una estructura que acompañe la envergadura del emprendimiento y lo haga sustentable en el tiempo. La gestión para la construcción del centro fue de la Fundación Leandra Barros que ha sido la gran impulsora de esta iniciativa y Pergamino cuenta hoy con uno de los pocos centros de similares características que funcionan en el país, con la complejidad que ello implica.

En función de esto, desde hace un tiempo se trabaja en el diseño de una estructura funcional que requerirá de la creación de una figura- bajo la forma de una Fundación- que le permita al centro ganar identidad y tener una dinámica propia. La responsabilidad de este armado recae sobre los actores que están involucrados en esta iniciativa. Por un lado, la Fundación Leandra Barros; por el otro la Provincia de Buenos Aires, a través del Ministerio de Salud  y el Municipio. Tres patas para dar forma a un modelo de gestión público- privado que confiera sustentabilidad al espacio dotado de la más alta tecnología para el tratamiento de diversas patologías oncológicas, no disponible en otros lugares de la región.

Con la construcción casi lista y la llegada de los equipos que fue informada esta semana por la Fundación Leandra Barros, el conjunto de la comunidad se pregunta qué significa tener en Pergamino un centro oncológico y cómo esto impacta por su potencialidad. Algunas cosas ya se saben, otras están pendientes de definición, por cuanto hay un entramado de gestión complejo que desentrañar.

Si bien para el sistema de salud local el modelo resulta novedoso, no es el primer centro que funcionará con esta dinámica. De hecho es la propia Comisión Nacional de Energía Atómica- responsable de la implementación del Programa y quien supervisó a la empresa Invap en el armado, que supuso contratar a la empresa Rode para la obra civil y adquirir los equipos-la que sugiere la impronta que deben tener estos espacios y quien propone posibles estatutos para delimitar competencias y responsabilidades en el funcionamiento del centro que aún no tiene un nombre definido, pero que muchos entienden terminará por llamarse: Centro Oncológico Pergamino.

 

Los servicios que prestará

Diversas consultas realizadas por LA OPINION para la redacción de este informe revelan varias cuestiones vinculadas a los servicios que allí se brindarán. Desde el punto de vista médico está pensado como un lugar donde se tratarán las patologías oncológicas de manera integral, y donde podrán realizarse tratamientos de radioterapia- con los aceleradores lineales que ya se están instalando- y braquiterapia- con un equipo que aún no arribó a la ciudad-, además de quimioterapia.

 

Cómo es hoy

Hasta el momento, los pacientes que se atienden en el sistema público de salud- esto quiere decir que es el Ministerio de Salud de la Provincia de Buenos Aires el órgano que financia los tratamientos- deben trasladarse a la ciudad de San Nicolás para realizar sus aplicaciones de rayos en un centro especializado en terapia radiante con el que se tiene convenio. Las aplicaciones de quimioterapia, en tanto, las  realizan en el Centro de Día “Leandra Barros” construido hace unos años por la Fundación en uno de los pabellones del Hospital San José. 

Para aquellos pacientes con cobertura social que se atienden en la ciudad, funciona un centro de terapia radiante donde realizan su tratamiento de rayos  y las aplicaciones de quimioterapia se  administran en instituciones de salud, bajo la supervisión de oncólogos que trabajan en el subsistema privado.

 

Cómo será en el futuro

A partir del funcionamiento del centro, Pergamino contará con un lugar que será empleado por pacientes de una amplia región. Respecto de ello, LA OPINION pudo saber que el Ministerio de Salud de la Provincia de Buenos Aires está trabajando en diagramar el organigrama para definir qué ciudades tendrán este centro como referencia y de este modo armar la red de derivación adecuada. Aunque este esquema aún no está definido, hay quienes refieren que el radio de alcance será mayor al de las ciudades comprendidas bajo la órbita de la Región Sanitaria IV e incluso no se descarta en un futuro poder firmar convenios con otras provincias cercanas. La cartera sanitaria bonaerense está trabajando este tema para el sistema público de salud. Sin embargo, por la estructura funcional que se piensa para este espacio, se aspira a que puedan atenderse también pacientes con cobertura social, a partir de convenios que se establezcan con obras sociales sindicales y empresas de medicina prepaga.

En este sentido, no habrá una distinción entre quienes tengan obra social y aquellos que no posean cobertura, por cuanto la envergadura del proyecto es tal que podrá asistir tanto a unos como a otros si se logra un armado funcional que lo haga sustentable y lo dote de los recursos necesarios. Quienes están trabajando en el diseño de este modelo de funcionamiento, aseguran que lo único importante será que la persona reciba el tratamiento que necesita sin importar quién lo financia. Para ello será necesario asegurar ciertos recursos y hacer que el lugar gane jerarquía.

El gran desafío es que el centro oncológico pueda comenzar a funcionar y esté a la altura de las circunstancias. Los más optimistas aseguran que antes de fin de año esto será posible, algo que con toda la complejidad administrativa y científica que entraña, visualizan como una tarea que será beneficiosa para la ciudad que se transformará en un polo de referencia en la atención de enfermedades oncológicas de alcance regional.

 

Los recursos humanos

Uno de los aspectos más sensibles en relación al funcionamiento del centro oncológico es el que tiene que ver con los recursos humanos que trabajarán en él por cuanto se requiere de profesionales altamente calificados tanto para manejar los equipos como para monitorear el curso de los tratamientos. En rigor es un tema que aún está pendiente de definición y esto tiene que ver con que aún no está definida la estructura de funcionamiento que tendrá. Se sabe que se requerirán además de médicos especializados en oncología, personal administrativo, de enfermería, técnicos, radioterapeutas, físicos y técnicos. En una primera etapa se piensa en armar un cronograma que permita ir dando respuesta a la demanda que se tenga y readaptar los planteles en la medida que el funcionamiento del centro lo requiera.

 

Recaerá sobre esta “nueva fundación” y su directorio la responsabilidad de tomar a su cargo la designación y pago del personal, porque hasta donde se sabe no está previsto que sea el Ministerio de Salud quien financie el recurso humano. Hay quienes señalan que esto no quita que profesionales de la especialidad que trabajan en el sistema público de salud- el Hospital cuenta con dos oncólogos- puedan hacerlo en el centro y destinen sus horas asistenciales a los pacientes del ámbito público utilizando las instalaciones del centro y al mismo tiempo puedan ejercer allí su tarea  del ámbito privado. En función del alto grado de especialización que se requiere, no se descarta que puedan convocarse profesionales de otros lugares para que puedan desempeñarse en el centro. Aseguran que es crucial la figura del radioterapeuta y del físico para el manejo adecuado de los equipos. Son cuestiones que hasta el momento no están definidas y a decir verdad, hasta el momento no hay una base de financiamiento establecida porque para generar recursos es clave que el centro comience a funcionar.


Otros de esta sección...
BuscaLo Clasificados de Pergamino y su región
Buscar en Archivo
Tapa del día
00:00
15:42
Errores:  0
Pistas:  38

Tu mejor tiempo:
12:07
Registrate o Ingresá para poder guardar tus mejores tiempos.

Nueva Partida
1 2 3 4 5 6 7 8 9
Editorial
Funebres
Perfiles Pergaminenses
Lejos del pago
Farmacias de turno

LO MÁS LEÍDO