Se abrieron los sobres para la licitación de la Hidrovía Paraguay-Paraná y, de forma sorpresiva, solo ofertó una compañía; el vocero presidencial Manuel Adorni confirmó que se dejó sin efecto el proceso de selección y señaló que el Ejecutivo "será implacable ante cualquier intento de manipular los resultados".
"La única oferta presentada fue la de DEME, que se ocupó de teñir el proceso de denuncias de faltas de transparencia, demandas ante la Justicia y otras acciones, que desistieron pocos días antes" de la presentación de ofertas, dijo el funcionario en una conferencia de prensa en Casa Rosada.
A las 12:59 de este miércoles venció el plazo para enviar propuestas y, minutos más tarde, se publicó el Acta de Apertura de sobres. Contra todo pronóstico, sólo DEME había aplicado para competir.
La ausencia de Jan de Nul en la nómina de oferentes fue toda una sorpresa, dado que la compañía había manifestado interés en el pliego y se había defendido de las acusaciones que indicaban que el Gobierno había redactado un pliego a medida de ella.
Llamado de atención
El Gobierno también subrayó que, pese a la inscripción de 11 empresas en el proceso y la existencia de consultas formales e informales sobre la participación de más compañías, ninguna otra presentó oferta.
Ante esto, ordenó una investigación para determinar si DEME ejerció presiones sobre otros competidores o si hubo una posible asociación ilícita en perjuicio del Estado y los productores argentinos.
El vocero presidencial aseguró que la investigación buscará "aclarar los acontecimientos ocurridos en el marco de esta licitación" y establecer responsabilidades penales en caso de intento de fraude. Luego, cedió la palabra al director ejecutivo de la Agencia Nacional de Puertos y Navegación, Iñaki Arreseygor, para brindar detalles técnicos sobre la situación.
Misión imposible
La historia de la Hidrovía muestra que licitarla fue una verdadera misión imposible para los últimos gobiernos. Todo empezó en 1993, con el pliego inaugural y el primer ganador: un consorcio compuesto por la belga Jan de Nul y Emepa, del empresario Gabriel Romero. La concesión la prorrogó en 2010 Cristina Kirchner hasta 2021. En la Causa Cuadernos, Romero admitió haber pagado coimas por US$600.000 para obtener la prolongación del contrato.
El macrismo había realizado un pliego para cuando finalizara dicha prórroga, pero perdió las elecciones. La gestión de Fernández intentó lanzar una licitación, aunque tras acusaciones de presunto direccionamiento a favor de Jan de Nul, intervino la Procuración de Investigaciones Administrativas (PIA).
El organismo señaló "irregularidades advertidas en el expediente administrativo por el que se llevó a cabo el procedimiento de la Licitación Pública N° 13/2021, que abarcan etapas iniciales del procedimiento, como la confección de los correspondientes pliegos de bases y condiciones, pero también posteriores, como los sistemas utilizados para calificar oferentes y sus respectivas ofertas".
La Hidrovía es la principal ruta comercial del país, por donde circula el 80% de las exportaciones e importaciones agroindustriales. Su trayecto nace en Buenos Aires, sube por la frontera entre Santa Fe y Entre Ríos, bordea Corrientes, Misiones, Chaco y Formosa, y sigue camino hacia Brasil, Paraguay y Bolivia.
Su actual profundidad de 36 pies permite cargar al 60% la bodega de los buques. Las obras de dragado pretendidas aumentarían el caudal de agua al menos a 39 pies, lo que elevaría "a alrededor del 90%" la capacidad de carga.