El Gobierno impulsa una serie de modificaciones en el régimen migratorio nacional. En particular, la administración libertaria busca que las universidades nacionales y públicas del país "puedan cobrar aranceles a los estudiantes extranjeros no residentes".
Además, la gestión nacional se dispone a poner "fin a la gratuidad de la atención médica para extranjeros", tal como viene pasando en estos momentos en el sistema de salud argentino y en la mayoría de las provincias, excepto Salta.
En su conferencia de prensa de este martes, el vocero presidencial, Manuel Adorni, subrayó que se impulsan estas medidas "con el objetivo de avanzar hacia un país ordenado, que cuide sus fronteras y proteja a los ciudadanos argentinos".
"Esto representará una tasa de financiamiento para las casas de estudio. Como ejemplo, uno de cada tres estudiantes de la carrera de Medicina es extranjero", dijo el vocero presidencial, respecto del arancel en universidades.
Con respecto a la atención sanitaria, el funcionario afirmó que "los organismos nacionales, provinciales y municipales competentes en materia de salud van a determinar las condiciones de accesos al sistema de salud, incluyendo la posibilidad de cobrar el servicio a los extranjeros que no residan en el país".