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Los problemas en el tránsito no son nuevos y por tal motivo van modificándose los controles, se adecúan las normativas y se desarrollan cambios en el ejido urbano para lograr mejoras en la seguridad vial, evitando accidentes y preservando la integridad física de las personas que circulan en Pergamino.
En este sentido, hay un proyecto en marcha para que salvo bulevares y avenidas, el resto de las calles sean de mano única. "Es una iniciativa compartida que estamos trabajando con Francisco Illia y Juliana Rueda, que son los miembros de nuestro bloque con quien comparto la Comisión de Tránsito y Transporte. Además, hablé con el director de Tránsito, ya que es el representante del Ejecutivo que entiende en el área", señaló el concejal Ignacio Maiztegui, presidente del bloque "Juntos" en el Concejo Deliberante.
"Tenemos la necesidad de resolver el tema tránsito porque se está poniendo cada vez más complejo en la ciudad; hay muchos vehículos y necesitamos generar herramientas que ayuden a ordenarlo. Y queda en evidencia, cada vez más necesario, que en muchos lugares donde existen calles de doble sentido de circulación no pueden estar más con esas disposiciones", agregó el edil en la entrevista.
- ¿Cómo están planteando estas modificaciones dado el volumen de calles que hoy son de doble circulación?
- Esto venía siendo un problema que se vio agravad, entre comillas, o puesto en evidencia, a partir del plan de pavimentación que se hizo el año pasado, donde un montón de calles que eran de tierra o de mejorado pasaron a estar pavimentadas.
Entonces, eso incrementó la velocidad y entendemos que se deberán generar las condiciones necesarias para tener un tránsito más ordenado, sin que esto implique complicarlo, sin que esto quite fluidez, sin que implique cortar vías de circulación, pero creemos que es una cosa que no podemos dilatar.
Por eso mismo estamos trabajando barrio por barrio de la ciudad, entendiendo cuál es el sentido lógico de circulación que tiene que tener cada uno de esos sectores ya que hay ciertas pautas a tener en cuenta, por supuesto, sin perder de vista que el objetivo es ordenar el tránsito sin complicar de ninguna manera lo que ya está establecido. Hay varios sectores que, con la doble circulación de las calles, se hacen realmente peligrosos. Más aún, como lo explicaba, después de haberse pavimentado las calles.
- Laguna del Virrey, barrios 12 de Octubre y otros puntos de Pergamino están con serios problemas de seguridad vial por calles en doble sentido de circulación.
- El problema principal que se genera es que, en la gran mayoría de los casos, son calles que tienen un ancho tradicional donde habitualmente, además, hay autos estacionados, razonablemente hay autos parado, entonces si a eso encima le sumamos la posibilidad de generar un doble sentido de circulación, se producen inconvenientes que, si no lo resolvemos rápidamente, lo que hacen es afectar muchísimo la seguridad del tránsito.
En la primera etapa es un trabajo sobre los planos de la ciudad. Posterior a eso vendrá la revisión en cada uno de los lugares aunque cabe señalar que sobre algunos barrios ya hemos avanzado. Y en la parte final del proceso, por supuesto, habrá una ordenanza que tendrá que ver con la determinación de esos únicos sentidos de circulación, por un lado, y por otro lado, obviamente, dotar de señalización y carteles para establecer ese proyecto.
- Más allá de avanzar en el proyecto, hay que modificar la señalización de las calles, hay que informar a los vecinos porque muchas calles que se pavimentaron hace años que son de doble circulación.
- Sí. Obviamente nosotros vamos a afirmar prioridades. Hay barrios que no tienen este problema, sinceramente, que ya lo tienen resuelto. Nos vamos a abocar, daremos un orden de prioridades en donde entendemos que se está con más complejidad sobre este problema. La idea es avanzar sobre cada uno de los barrios donde sea necesario hacer ese trabajo. Pero, por supuesto, yo creo que más allá de lo que uno pueda establecer en ordenanza, de todas las veces que lo pueda comunicar, finalmente lo que mejor ve el vecino y lo que ayuda más a ordenar este tipo de cosas es la señalización.
Hasta que uno no ve el sentido de circulación establecido en los carteles, es complejo que la gente lo adopte, pero son procesos y estamos en marcha. A modo de ejemplo, el año pasado y el anterior hemos hecho algunas pruebas en ciertos barrios en particular, en sectores de la zona sur, en cercanías del Colegio San Pablo, y la verdad que el proceso de adaptación, por suerte, es bastante rápido. La experiencia dice que en no más de dos o tres semanas, si está bien comunicado, si está bien señalizado, y eventualmente con algunos controles puntuales de la gente de Tránsito durante un primer periodo de adaptación, esto se consigue rápidamente.
Estamos ante una necesidad de resolver temas que son cada vez más complejos en la ciudad, por eso hablamos de calles que tienen un ancho tradicional donde la lógica dice que no debieran tener un doble sentido de circulación; habrá un periodo de adaptación, porque muchas veces hay usos y costumbres que ya están establecidos y que estas cosas un poco van a romper con eso, pero la verdad es que es necesario avanzar en ese tema.
- ¿Qué pasará con la circulación de avenidas tales como Juan B. Justo, Illia, Alsina y De Mayo ya que muchas veces se habló de convertirlas en entradas y salidas?
- En principio la prioridad es lo que estoy informando, avanzar sobre aquellos lugares que nosotros encontramos que tienen una mayor complejidad pero por supuesto que el proyecto integral, es mucho más amplio, porque incluso hay alguna idea, en el mediano plazo de realizar, por ejemplo, modificaciones en el sentido de circulación de avenida Illia, la zona de Colón y por otro lado Juan B. Justo porque había un proyecto que preveía que estas arterias fueran de un único sentido de circulación, aunque hay que evaluar esas situaciones hasta dónde genera una solución y no un problema.
