Bormioli ponderó la gestión de Kicillof y aspira a que el peronismo vuelva al poder

El exdiputado nacional, Lisandro Bormioli, fue incorporado al Gobierno de la provincia de Buenos Aires que dirige Axel Kicillof. Precisamente fue convocado por Carlos Bianco del Ministerio de Gobierno, para asumir dentro de su cartera el rol de director de Relaciones Parlamentarias, es decir, que será el nexo entre los poderes Ejecutivo y Legislativo bonaerenses.

Quien fuera concejal en nuestra ciudad, siempre representando al kirchnerismo, y referente de Kolina, fue convocado por Bianco y Kicillof "para sumar su experiencia al trabajo que venimos realizando en la provincia de Buenos Aires", expresó en su Instagram personal Carlos Bianco.

En diálogo con LA OPINION, Bormioli expresó su alegría por "este nuevo desafío" que se le presenta luego de haber dejado en diciembre la banca de diputado nacional. "El objetivo es volcar la experiencia que tuve en la legislatura nacional en la función pública, oficialmente seré el nexo entre los poderes Ejecutivo y Legislativo, quedando siempre a disposición del ministro Carlos Bianco y del gobernador Axel Kicillof", contó Bormioli.

La gestión provincial

Analizando la labor que se viene haciendo desde la gestión provincial que encabeza Axel Kicillof, que está enmarcada en un gobierno nacional ideológicamente opuesto, el exdiputado manifestó que "existe por parte del presidente, Javier Milei, un ensañamiento especial con nuestro gobernador, con la quita del Fondo Nacional para los docentes, por ejemplo, no entendiendo que a quien termina perjudicando es al propio bonaerense".

En este complejo contexto, Axel (Kicillof) "con un esfuerzo enorme está sosteniendo las políticas públicas que la Provincia venía desarrollando, sosteniendo el poder adquisitivo de los trabajadores estatales, sean médicos, docentes, administrativos provinciales, estableciendo la apertura de las paritarias mensualmente. Kicillof está haciendo un esfuerzo descomunal para sostener su política de trabajo y además enfrentar la crisis económica traducida en, por ejemplo, enviar más alimentos a los comedores porque la demanda es mayor, reunirse con los referentes universitarios para saber en qué situación están las casas de estudio luego del recorte presupuestario del Gobierno nacional, sumado esto a la mayor demanda que se está registrado en la salud pública, la educación pública. Todo esto es consecuencia de un Estado nacional que se desentiende de la cuestión pública y que no entiende cuál es la responsabilidad del Estado en los territorios. Ante toda esta situación de crisis, el gobernador, está poniendo el cuerpo, la cabeza, la iniciativa y siempre está pensando cómo contener al ciudadano".

Bancar al gobernador

Haciendo un llamamiento a los bonaerense a "acompañar al gobernador en esta titánica tarea", Bormioli también sostuvo que "los políticos, tanto de nuestro espacio como el de espacios opositores tenemos que estar a la altura de las circunstancias para sostener a los municipios de la provincia de Buenos Aires y así poder contener al bonaerense en esta situación de dificultad que nos pone el Gobierno nacional".

"Impuestazo"

Desde hace algunos meses, Kicillof viene siendo el blanco de críticas por el "impuestazo" que le valió sobre todo una afrenta con un sector del agro. Al respecto, Bormioli, indicó que "esa crítica tiene un tinte político partidario ya que algunos quisieron sacar una tajada pero no les salió la jugada porque no tuvieron el acompañamiento masivo del sector". 

Exponiendo datos concretos, Bormioli informó que en Pergamino, en el marco del impuesto inmobiliario, "el 38,9 por ciento, o sea más de 6.900 productores tiene un aumento del impuesto rural igual o menor al 200 por ciento, que es muy inferior a la inflación interanual del mes de febrero, que es más de 270 por ciento. De esas 6.900 partidas solamente 76, que pertenecen al tramo de la base imponible de la tierra más alto, tierras que superan los 198 millones, sufrieron un incremento superior a la inflación y casi el 21 por ciento de las partidas tienen un incremento igual o menor al 180 por ciento. Con lo cual los aumentos se están aplicando teniendo en cuenta la inflación y con una concepción de equidad en función de la capacidad de aporte de los contribuyentes", y añadió que este incremento le permite al Gobierno provincial "hacerse cargo de muchas cuestiones que le competen al Gobierno nacional y de las cuáles éste se desentiende". 

Para Bormioli lo importante es que "el gobernador jamás implementará una medida que vaya en contra de las grandes mayorías".

 La política en Pergamino

Haciendo una lectura de la gestión de Javier Martínez en Pergamino, el flamante funcionario provincial manifestó que "Martínez siempre ha tenido palabras bastantes ásperas contra nuestro gobernador y creo que la función de un intendente siempre es pensar primero en su ciudad".

Poniendo el foco en la última gestión de Martínez a cargo de la intendencia, Bormioli sostuvo: "No se políticamente cómo se manejarán, no se si terminarán haciendo una coalición con los libertarios. Entiendo que Juntos por el Cambio tal como lo conocíamos no existe más, está divido, los radicales por un lado, el PRO que ya no es más PRO, Larreta va por un lado, Macri por otro". 

La incertidumbre que se plantea en cuanto al armado político del oficialismo local genera buenas expectativas en los sectores opositores. "Pensando que, en principio, la Ley no le permite a Martínez ser candidato nuevamente a intendente, nosotros como fuerza política tenemos que, en estos cuatro años, con la mayor humildad, con compromiso, hacer un trabajo muy claro con todos los sectores para poder construir una alternativa política que haga en la ciudad lo que no se hizo hasta el momento, descentralizar la gestión municipal poniendo el foco más en la producción, poner un piso de igualdad entre los barrios de la ciudad y el centro, trabajar mucho en la generación de empleo joven, en la ejecución de obras que aún faltan".

Reacomodamiento peronista

A nivel nacional, según Bormioli, el peronismo, como en toda derrota sufrida, está atravesando un proceso de reacomodamiento. "El peronismo necesita hacer una autocrítica, necesita debatir internamente, abrirse, plantear una nueva visión, renovar el diálogo con la ciudadanía y hacerlo con mucha humildad, respeto y transitar la construcción de la alternativa política de cara a las elecciones. Sabemos de antemano que este Gobierno dejará tierra arrasada por lo que habrá que hacer un trabajo de reconstrucción que será muy difícil pero al que estamos acostumbrados porque al peronismo siempre le tocó empezar de cero después de una gestión que destruye, incluso lo que se hizo bien. Ojala todos los gobiernos puedan entender que hay políticas que no se pueden tocar, como las jubilaciones, la generación de empleo, el fortalecimiento del mercado interno", afirmó el entrevistado al tiempo que vaticinó: "Cuando el peronismo recupere el gobierno nacional, la tarea que tendrá que asumir será titánica. En la historia argentina siempre es el peronismo el que vuelve a reconstruir el piso de igualdad para todos los argentinos".

-Y en este proceso de reconstrucción de una alternativa política, ¿qué lugar ocupará Kicillof?

-Es muy prematuro hablar sobre eso. Sin dudas nuestro gobernador es una figura importante a nivel nacional porque es el gobernador de la provincia más grande del país, con el mayor caudal electoral, que mayor cantidad de habitantes tiene. Kicillof impulsó e impulsa la reactivación en todos los sentidos. Es el mismo gobernador que hoy está llevando adelante a la Provincia frente a las adversidades, sin dudas Kicillof genera muy buenas expectativas.