Sin mantenimiento, carentes de señalización, con baches que se tornan peligrosos para los automovilistas, así están las rutas que atraviesan el Partido de Pergamino. Son carreteras que están bajo la órbita de Nación y Provincia, caminos que a diario son utilizados por cientos de conductores, tanto de vehículos particulares como los camiones de carga y el transporte público de pasajeros. Todos ellos encuentran rutas que obsoletas para estos tiempos que corren y muy peligrosas para el parque automotor moderno que las transita.
La ruta Nº 32 que une Pergamino con Rosario estaba reparándose, las obras llegaron a la altura de la planta de KW Argentina, en cercanías de Manuel Ocampo, pero a fines del año pasado se abandonaron por problemas económicos, incluso la empresa que estaba a cargo retiró la maquinaria y cerró el obrador que había armado en cercanías del acceso a General Gelly.
Otro camino en muy mal estado de conservación es el Nº 178, conocido como la "ruta a Bignad"; allí las malezas en las banquinas superan la altura de los guardarraíl y de los carteles indicadores; además, las grietas en la cinta asfáltica se taparon hace años y resultará prioritario que se trabaje al respecto, incluyendo la rotonda con la ruta Nº 50 donde el pavimentó está destrozado, cordones sin pintar y luces quemadas.
Pero hay una zona del Partido que se lleva todas las miradas, reclamos y advertencias por la inseguridad vial. No es ni más ni menos que la ruta Nº 188, que en los últimos cinco años se dañó tanto que hasta los vecinos de los pueblos, tales como Guerrico, Acevedo y Peña realizaron hace un tiempo una manifestación a la vera de esta carretera para pedirle a Vialidad Nacional que intervenga cuanto antes, pero nunca se hizo nada al respecto desde el organismo.
Interviene el Municipio
Sin respuestas oficiales ni trabajos a la vista, la Municipalidad se hará cargo del bacheo; los inconvenientes para andar son cada día más evidentes y está en riesgo el transporte de pasajeros que viene a Pergamino desde San Nicolás porque hay que utilizar el carril contrario para circular ya que tienen que esquivar los pozos.
"Volvimos a pedir autorización para hacer las obras, sabemos que nuestra incumbencia ahí es extremadamente limitada, pero tenemos que pensar en los vecinos del Partido que andan todos los días por esa ruta", contó a LA OPINION el intendente Javier Martínez.
"Las quejan son constantes y justificadas; y como no vemos reparaciones por parte del Estado nacional, solicitamos los permisos correspondientes para poder intervenir desde el Municipio", agregó el mandatario local.
Respecto a las tareas que se evaluaron, se hará una intervención que tiene que ver con la reparación de la cinta asfáltica y el bacheo "así que aguardamos que nos envíen el convenio correspondiente para empezar con los trabajos", señaló Martínez reconociendo que la Municipalidad pidió la llegada de un técnico de Vialidad para que supervise las obras y se puedan cumplir con los requisitos obligatorios en materia de bacheos, incluso con los mismos materiales y disposiciones con las que se manejan a lo largo y ancho del país en materia de refacciones de rutas.
Más seguridad vial
El intendente reconoció que tomaron la decisión de encarar el proyecto "para proteger a nuestros vecinos que necesitan andar por esa ruta; el estado de abandono es total y el riesgo muy grande", aseguró. Asimismo Martínez reconoció que este plan de tareas que encara el Municipio tuvo una gran repercusión en las comunas de la zona.
"Lo que pasa es que nosotros, los intendentes, somos la primer barrera, los que estamos más cerca de la gente y uno entiende la necesidad de las obras. Quizás hay cosas que no podamos realizar, como por ejemplo la represa en el Arroyo, pero entendemos que haciendo un esfuerzo económico podemos encarar estos trabajos en la ruta Nº 188", dijo ayer a la mañana el titular del Ejecutivo en la nota. "Aquellos que andamos por esa ruta en forma permanente nos damos cuenta del riesgo que estamos corriendo, más aun en los días de lluvia; pero además notamos mucha inacción en otras rutas, falta de cuidado en las banquinas, no hay demarcación ni carteles y otras falencias que están a la vista de los usuarios".
Sobre este tema en particular, Javier Martínez contó que con maquinaria y personal de las delegaciones y el Municipio se están desmalezando las banquinas de caminos tales como Guerrico La Violeta. "Si un vecino tiene que parar por algún inconveniente en la banquina, ni siquiera se veían los guardarraíl y eso es un peligro; los pastos están tan altos que no hay espacios para detenerse, y por tal motivo empezamos a cortarlos en ese y otros caminos que se incluyen para hacer el mantenimiento que esté al alcance de nosotros".