El jueves en horas del mediodía, desde el Taller Protegido, partió un nuevo camión cargado con botellas de Plástico PET, tarea que se enmarca en el Programa "Sumando Compromiso" que se desarrolla ininterrumpidamente desde 2016 en nuestra ciudad, a través del que el Taller aplasta y enfarda las botellas plásticas que son depositadas en las campanas naranjas distribuidas en la vía pública, contribuyendo de esta manera a cuidar el medio ambiente pero también haciendo de esta propuesta un sostén económico para la institución.
El número 25
Brindando más precisiones sobre el hecho, la presidenta de la comisión directiva del Taller Protegido, Dora Moyano, contó que el jueves salió el camión Nº 25 (desde que se inició el Programa en Pergamino), cargado con botellas, llevó 9.200 kilos de plástico PET, cloro y lavandina. "Como cada camión que sale lo festejamos y agradecemos. Cada vez que sale un camión nos gusta decir que tuvimos un día de cosecha porque si bien es el trabajo que los operarios realizan en el Taller Protegido clasificando botellas que llegan, agradecemos la colaboración de toda la comunidad que decide no tirar las botellas de plástico en la basura y colocarlas en las campanas naranjas", señaló Moyano e hizo extensivo el agradecimiento a las personas que llevan las botellas hacia el Taller, ya sea particulares como el personal asignado a esta tarea de la Dirección de Higiene Urbana que recoge las botellas de la campanas y las traslada a la institución.
Un trabajo costoso
El número 25 se trata del primer camión que sale en 2024, el último del 2023 fue en septiembre. Al respecto la entrevistada dijo que "pasaron muchos meses desde septiembre hasta ahora. La demora que se produce entre la carga de camiones va directamente de la mano de la cantidad de botellas que recibimos en el Taller. Tenemos una capacidad operativa para clasificar y enfardar que nos permitiría mandar un camión para reciclar, de aproximadamente 8.000 kilos de botellas, una vez por mes o cada 40 días pero lo estamos pudiendo enviar cada cuatro meses porque la cantidad de botellas que recibimos ha bajado considerablemente". Y afirmó que "hubo una baja en la cantidad de botellas recolectadas. Estamos recibiendo 2.000 kilos de botellas por mes cuando en realidad debiéramos recibir 8.000. En algún momento ese objetivo se cumplió, en el inicio del programa allá por 2016-2017. Quizá la gente piense que es lo mismo una campana que otra y por eso tira las botellas en cualquiera de ella" por eso haciendo docencia, Moyano aclaró que "todas las botellas que se dejen en el contenedor verde no llegan al Taller, sólo son destinadas las que se ubican en la campana naranja. Necesitamos del compromiso de la gente para que podamos seguir recibiendo las botellas".
El circuito de las botellas
Sobre el circuito de las botellas y todos los que participan en ella, desde la institución se explicó que el primer eslabón de la cadena solidaria lo constituyen las personas que dejan los envases de plástico en las Campanas Naranjas. En este marco se reforzó el mensaje hacia la ciudadanía para que el depósito de botellas de plástico se realice en las campanas naranjas específicamente.
Luego los empleados de Higiene Urbana del Municipio y personas particulares trasladan las botellas al Taller y también colaboran cada vez que hay que cargar un camión para despachar. Un grupo de voluntarios, además de los operarios de la entidad, se suman a la labor de clasificación de las botellas.