Pergamino

El servicio de Hemodinamia de la Clínica Pergamino adquirió un angiógrafo de última generación


Marcelo Menéndez describió las características y potencialidad de la tecnología adquirida para el Servicio de Hemodinamia

Crédito: LA OPINION

Marcelo Menéndez describió las características y potencialidad de la tecnología adquirida para el Servicio de Hemodinamia.

Permite mayor precisión tanto en el diagnóstico como en la terapéutica de la patología vascular, además de ampliar la posibilidad de abordaje de casos de mayor complejidad sin la necesidad de derivar a pacientes a centros urbanos más importantes. Su incorporación requirió entrenamiento del personal y adaptación de la infraestructura.

El Servicio de Hemodinamia y Cardiología Intervencionista de la Clínica Pergamino realiza procedimientos mínimamente invasivos que permiten, desde la realización de estudios de diagnóstico hasta el tratamiento vascular, no solo de las arterias coronarias sino de todo el territorio de arterias del organismo, incluso el tratamiento de las enfermedades estructurales del corazón. La especificidad de la tarea requiere que la actualización en equipamiento sea constante y en este marco, y fruto de una importante inversión realizada, el servicio adquirió un angiógrafo digital de última generación que es la aparatología que reemplazó al que existía y que aporta "una nueva tecnología por cuanto se trata de un equipo muy sofisticado y de última generación que posiciona al servicio entre los centros que ofrecen esta capacidad instalada en los principales centros urbanos del país", explicaron.

Para conocer detalles de este equipamiento médico que ya está funcionando a pleno en la sala de Hemodinamia de la Clínica Pergamino, LA OPINION entrevistó al doctor Marcelo Menéndez, jefe del Servicio de Hemodinamia y Cardiología Intervencionista del sanatorio, quien explicó que "la compra de este angiógrafo digital de la marca Siemmens representa un salto cualitativo importantísimo en nuestra oferta prestacional por cuanto significa la incorporación de tecnología de última generación". 

"Este equipo cumple la misma función del angiógrafo que teníamos, pero con una calidad muy superior", señaló y describió: "En cuanto a las prestaciones de software y tecnología, su instalación importó un cambió 180 grados comparado con el equipo que teníamos previamente".

"El equipo permite mejorar sustancialmente la calidad de las imágenes, procesarlas de otra manera y mejorar su evaluación y por consiguiente alcanzar mayor certeza diagnóstica de la enfermedad vascular que estamos observando y de la mano de ello, mejorar y consolidar la terapéutica", resaltó, recordando que en Hemodinamia el angiógrafo digital se usa tanto en la fase de diagnóstico como de tratamiento.

En la misma línea abundó: "El software de este equipo permite analizar la lesión, mostrar con precisión milimétrica el diámetro de la arteria y su obstrucción, el diámetro de la válvula y un sinnúmero de detalles que permiten planificar de manera más efectiva el procedimiento intervencionista".

Asimismo, destacó que esto acorta los tiempos del procedimiento, algo que redunda en beneficio para el paciente porque se ve sometido a una menor exposición a la radiación y a menos utilización de material de contraste, entre otras cuestiones. Esto sucede porque una tecnología de este tipo fideliza mucho los mecanismos y amplía el campo de posibilidades para el abordaje de muchas patologías complejas que afectan el sistema coronario y vascular.

En relación a la inversión, Marcelo Menéndez recordó que "Hemodinamia es uno de los servicios más importantes de la Clínica Pergamino" y que la sociedad anónima de la Clínica también forma parte de la sociedad constituida para el Servicios de Hemodinamia, por lo que fue parte de la inversión realizada".

 Además, resaltó que "la decisión de comprar este equipo fue la resultante de la vocación de seguir dotando al servicio de la tecnología necesaria para estar a la vanguardia en un campo como el de la cardiología intervencionista y la hemodinamia donde los avances ocurren de manera constante y el desarrollo de tecnología exige de una actualización constante".

"Para estar a la altura de los requerimientos de esta especialidad y tener tecnología médica de última generación es un imperativo y con esa premisa avanzamos en la compra de este angiógrafo digital que les brinda a nuestros pacientes la posibilidad de acceder a la mejor tecnología para la realización de sus estudios y tratamientos", remarcó.

En este punto, señaló que el angiógrafo digital que ya está funcionando en la Clínica Pergamino tiene la misma tecnología disponible en el Hospital Italiano de Buenos Aires, la Fundación Favaloro o el Instituto Cardiovascular de Buenos Aires, es decir en los principales centros que son referencia en la especialidad. "Esto significa que hoy tenemos disponible en Pergamino las mismas posibilidades de diagnóstico y tratamiento a las que se puede acceder en los principales centros urbanos del país", destacó.

En otro orden, mencionó que se trata de un equipamiento importado que supuso no solo una fuerte inversión sino una serie de trámites orientados a su importación, atendiendo a un contexto como el actual en el que estas cuestiones están sujetas a ciertas restricciones: "Nos tocó afrontar esta inversión en un contexto adverso, costó bastante poder importarlo, pero ya está funcionando a pleno", agregó reconociendo que la especialidad no es ajena a la realidad económica que vive el país.

Respecto de ello señaló que, a pesar de las dificultades de la coyuntura económica actual, se hacen los esfuerzos necesarios para resolver situaciones y no afectar el normal funcionamiento del servicio. "Estos procedimientos necesitan el equipamiento, el personal y los suministros y es cierto que hoy en día tenemos algunos inconvenientes de provisión que responden a la propia situación económica del país, pero tratamos de ir solucionándolos tratando de brindarle al paciente las mejores opciones de tratamiento".

Consultado respecto de cómo están trabajando, aseguró que no han tenido que reprogramarse prácticas, pero reconoció que fue necesario buscar alternativas y evaluar opciones de insumos para evitar esperas al paciente. "Sabemos que exponer a un paciente que necesita un tratamiento intervencionista a una larga espera tiene un costo muy importante para su salud y por todos los medios tratamos de evitarlos", recalcó. Y abundó: "El paciente ya no es el mismo tiempo después, en medicina los cambios son muy dinámicos y tratamos de adaptarnos entendiendo que muchas de las variables que nos propone el contexto económico escapan a nuestras posibilidades". 

Mejores prestaciones

Volviendo sobre el equipamiento adquirido, Menéndez insistió en que la tecnología adquirida incrementa las prestaciones del servicio y permite hacer procedimientos cada vez más complejos. "Pacientes que antes tenían que irse a otra institución de mayor complejidad hoy pueden resolver los procedimientos aquí", remarcó recordando que el servicio atiende tanto a pacientes de Pergamino como de una amplia región.

La adaptación del servicio

Por último, mencionó que la incorporación de este angiógrafo digital requirió del entrenamiento del personal y de la adaptación de la infraestructura de la sala de Hemodinamia para adecuarla a los requerimientos del equipo: "Hubo que sacar el angiógrafo, acondicionar la sala, reemplazar el piso quirúrgico y hacer una serie de adaptaciones orientadas a adecuar las instalaciones para recibir el nuevo equipamiento y al mismo tiempo llevar adelante una serie de entrenamientos y capacitaciones de los profesionales y operadores del equipo orientadas a garantizar que pueda utilizarse en todo su potencial", detalló.


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