Las falencias edilicias y de atención en el Registro Civil motivan el justo reclamo de los vecinos

Las dependencias de calle Florida son una afrenta a la normativa vigente en cuanto a la seguridad en los edificios, tanto por el estado del inmueble como por la ausencia de elementos que aseguren la accesibilidad a discapacitados y la evacuación en caso de emergencia. A esto se suman las quejas por demoras en la atención y falta de respuestas a situaciones comunes. Graves denuncias contra los empleados. 

Y un día a la gente se le colmó la paciencia. Si bien es una oficina a la que se debe concurrir de manera poco frecuente, para contados trámites, el vecino puede constatar que de una a otra visita, los problemas se agudizan y cada vez es más agobiante encarar una gestión en la vieja casona de la sede Centro del Registro Provincial de las Personas. 

Cambian los sistemas, se incorporan nuevas tecnologías, todo lo que supuestamente hace a simplificar y agilizar los trámites. Sin embargo, en Pergamino estas políticas no ha tenido efecto. Cabe señalar que una vez gestionado el documento o pasaporte, el trámite corre normalmente por el circuito del Ministerio del Interior y llega al domicilio en tiempo y forma, salvo contadas excepciones. El problema está en la etapa previa, aquí en Pergamino: demoras en los turnos que se otorgan para renovación de documentos, medidas de fuerza de los trabajadores del sector, malas condiciones edilicias y supuestos “acomodos” en el momento de hacer trámites, son algunas de las quejas que colapsaron a los pergaminenses a tal punto que en el transcurso de la semana tuvo que intervenir la Policía para evitar que la situación pasara a mayores.

“No es posible que nos hagan esperar tanto tiempo para hacer las gestiones del nuevo documento y cuando llegamos al puesto de atención nos dicen que ‘no hay sistema’”, es uno de los principales reclamos que se viene escuchando en la dependencia ubicada en calle Florida; “la verdad que es imposible venir acá, nos tienen apretados como animales y ni siquiera hay una ventana para que corra aire”, agregó otras de las personas que dialogó con el Diario.

Un viejo reclamo

“Estamos todos apretados, no hay espacio para nada y la atención es cada vez peor”, agregó un señor mayor que se acercó al cronista de LA OPINION que miraba la interminable fila que se había formado.

Las deplorables instalaciones del edificio son un viejo reclamo que la Provincia nunca tomó en cuenta, a tal punto que las últimas inversiones, llevadas adelante hace muchos años, poco modificaron la funcionalidad de una dependencia que recibe a centenares de personas. “Con cuidado cuando suban la escalera” es una de las plegarias de los empleados de la planta baja a quienes tienen que hacer trámites en el primer piso. Y se quedan cortos con la recomendación, porque los viejos escalones de madera no pasarían una simple inspección ocular, si es que alguna autoridad se digna hacerla. No sólo crujen demasiado sino que constituyen la única vía de escape del primer piso en caso de un siniestro. Y la salida de emergencia termina en el patio al que se llega atravesando la sala de ceremonias. De ahí, en más hay que saltar tapiales para llegar a la calle. ¿Es admisible esta situación?

Hay que convenir que de un tiempo a esta parte, más precisamente desde la tragedia de Cromañon, toda obra particular de uso público es constantemente inspeccionada verificando la presencia de elementos de seguridad, señalización y salidas de emergencia. Es decir, la misma Provincia que nos controla infringe las leyes.  

Sin accesibilidad

De más está decir que la falta de accesibilidad es notoria; no existe rampa para personas con discapacidad motriz ni se observan lugares señalizados para que puedan tener una mejor ubicación cuando son atendidos. De acuerdo a lo que pudo saber el Diario, estaba en carpeta la construcción de un ingreso especial que se encuentra demorado porque el estudio indicaría que la construcción de la rampa ocuparía mucho espacio en la vereda a tal punto que debería retirarse uno de los árboles ubicados frente al inmueble. “Ni hablar de la gente que viene en sillas de ruedas, vimos que se los atiende por la ventana o bien hay que apelar a la buena predisposición de los empleados que les facilitan el trámite saliendo ellos a la vereda”, confió una de las personas que habló con este medio.  

Turnos en la mira

En las localidades vecinas el otorgamiento de los turnos para renovar el DNI se cumple a medias; mientras que en Salto aseguran que el funcionamiento es normal, en Rojas se explicó que puede haber “pocas” demoras y que la situación no requiere de reclamos por parte de la gente. En esta línea, en El Socorro la cantidad de pergaminenses que concurre supera la operatividad de la oficina aunque todos coinciden que la atención “es buena; entregan los turnos con antelación y el día que toca no hay excusas y te hacen el documento”, afirmó una mujer que  renovó días atrás su DNI en este pueblo del Partido y espera en el Registro Provincial de Pergamino por un trámite “similar”. 

Pero lo más grave aún es la opinión de una madre que no reparó en palabras para decir que “estuve con mi nena en brazos más de una hora y media, sin ventilador y apenas me acercaron una silla; después de esperar tanto tiempo. En ese momento llegó una chica, habló al oído de una empleada en planta baja, y la hicieron subir. Hasta entonces no sabíamos lo que había pasado; a los pocos minutos esta joven baja las escaleras y le preguntó ¿te hicieron el nuevo documento?, y me respondió afirmativamente generando en mí un ataque de nervios. En ese momento le pregunto a la trabajadora del Registro el porqué de esos beneficios y me respondió ‘no sabía que vos podías subir la escalera’, dijo la empleada sin que yo pudiera decirle más nada por respeto a la gente que estaba en ese instante”, manifestó esta madre que se acercó a la redacción del Diario para comentar lo que le había sucedido en las dependencias públicas de calle Florida.  

Barrio Acevedo

De acuerdo a lo informado por los vecinos, en la delegación que funciona en la esquina de Siria y Salta no se están haciendo los nuevos documentos “por fallas en los sistemas operativos”; esta oficina cuenta con un solo puerto de atención para concretar la renovación del DNI aunque el mismo presenta “problemas” en reiteradas oportunidades.