El Servicio Meteorológico Nacional (SMN) dictó la alerta amarilla por tormentas y lluvias "intensas" para gran parte de la zona núcleo durante la mañana y tarde del martes 11 de febrero. El anuncio se hizo realidad, y las precipitaciones dejaron 16 milímetros en Chacabuco, 14 milímetros en Salto y 12 milímetros en Arroyo Dulce, 8 milímetros en Pergamino, por marcar algunas zonas del norte bonaerense.
De continuar esta previsión, configura otra gran noticia para esta región del país que es clave para la producción de granos gruesos y que en enero sufrió situaciones de sequía que provocaron daños en lotes de soja y maíz, y obligaron a recortar los pronósticos de cosecha.
Siguen las lluvias
Cuando la situación comenzaba realmente a complicarse, la semana pasada llegaron importantes caudales de precipitaciones a la zona núcleo y el panorama cambió.
De todos modos, los productores y técnicos afirman que las descargas son necesarias que continúen, para apuntalar la recuperación de los cultivos afectados, sobre todo los planteos de segunda de soja y tardíos de maíz.
En concreto, en esta oportunidad el SMN puso bajo alerta amarilla al norte de Buenos Aires, sur de Santa Fe y gran parte de Entre Ríos.
En esos lugares, podrían caer entre 20 y 45 milímetros, claves para que la campaña gruesa se desarrolle sin más inconvenientes.