Gastón Pauls sobre su rol testimonial: "El objetivo es mostrar que otra vida es posible"

Tal como fuera anunciado por LA OPINION, ayer en la Sala Roja de Cinema Pergamino se desarrolló una charla sobre prevención de adicciones. 

Organizado por la Granja San Camilo, el encuentro contó con la presencia del reconocido actor Gastón Pauls, que, en primera persona, contó su experiencia de consumo problemático y cómo decidió emprender el camino de la recuperación.

Además para la ocasión arribó a nuestra ciudad César Tapia, director de la comunidad terapéutica Nuestra Señora de Luján de Río Tercero (Córdoba), además de ser el director de Adicciones de dicha localidad. 

En contacto con el Diario, Juanito Cabrera, referente de la Granja San Camilo manifestó su satisfacción por el acompañamiento del público y ratificó la importancia de realizar este tipo de eventos, abiertos a la comunidad, en los que se busca interpelar a la sociedad toda generando un compromiso de cara al flagelo de la adicción.

En primera persona

LA OPINION tuvo oportunidad de dialogar con el actor y conductor Gastón Pauls, sobre este nuevo rol protagónico sobre su vida: "Vengo dando vueltas por el país desde hace seis años, la situación de las adicciones es muy compleja, grave y delicada. La gente está cada vez más necesitada de hablar y debatir sobre este tema, por eso sigo participando de estos encuentros", dijo sobre su participación.

Aunque ya estuvo aquí como actor, es la primera vez que Gastón Pauls visita nuestra ciudad para dar a conocer, en primera persona, el crudo relato de su experiencia de adicción y recuperación para, a través de ese testimonio, llegar a las personas sobre todo a quienes tienen un consumo problemático de sustancias. "El objetivo es mostrar que otra vida es posible para que quienes estén atravesando una adicción puedan emprender una recuperación", afirmó Pauls.

Transversalidad

Afirmando que el flagelo de las adicciones cruza y atraviesa a toda la sociedad "al que tiene guita y al que no, al judío, al católico, al que es funcionario o trabaja en relación de dependencia", el actor enfatizó que la grave situación demanda y exige un compromiso: "Si un funcionario relativiza el consumo, los efectos, la realidad; si en los medios de comunicación solo se vende que la cerveza es 'el sabor del encuentro' estamos complicados porque le hacemos creer a pibitos que ven esa publicidad que con la cerveza te cagás de risa, te divertís y te encontrás, una realidad ideal", dijo sobre situaciones que coadyuvan, casi imperceptiblemente para el común de la gente, para la instalación de un consumo problemático de sustancias; algunas ya instaladas, otras naturalizadas.

De sus recorridas en este tiempo de recuperación remarca asombrado: "Es impresionante la cantidad de personas que ingresan a los grupos anónimos, que no pueden dejar de fumar marihuana porque tienen ataques psicóticos, de pánico, que sufren abandono de persona".

Lo peligroso de naturalizar

Haciendo valer la idea que la naturalización del consumo de marihuana o alcohol es la "puerta de ingreso" a las demás sustancias, Pauls señaló: "La puerta de ingreso no es el paco o la pasta base, la heroína, el crack. El 80 ó 90 por ciento empieza su adicción con el consumo desmedido de alcohol y después con el porro. Por eso digo que es tan complejo el tema y si relativizamos esto, la gravedad de la situación es terrible". 

Ante este panorama poco alentador, Paul recordó que la última campaña masiva de prevención "fuerte" en el país fue hace 25 años con "Fleco" y "Male", dos personajes animados, y con el doctor Miroli que ofrecían información sobre lo que generan las drogas en el cuerpo humano.

Etimológicamente significativo

Pauls hizo una referencia pocas veces escuchada en torno a las problemáticas del consumo, para llegar a una sus causas: que la palabra adicción significa "no decir", de allí la importancia del diálogo y, desde su experiencia, su percepción de que el primer paso que debe dar tanto un adicto hacia su rehabilitación como quienes lo rodean es justamente hablar, decir lo que pasa. "Si uno se sigue quedando callado es cómplice del silencio social que se genera en torno a la problemática. Hay que debatir", plantea.

Su historia con las drogas

El consumo problemático del actor comenzó cuando era muy joven, a sus 14 años, con alcohol. Un año más tarde empezó a fumar marihuana y a los 17 se inició en el consumo de cocaína. Mantuvo su adicción por más de 35 años. "La sustancia siempre arranca como una cuestión de escape o con fines recreativos. Cuando la enfermedad se despierta, el consumo es lo único que te importa en la vida y no logras ver la gravedad del asunto aunque tengas intentos fugaces de frenar. La ceguera y la negación es muy grande, yo me quedaba encerrado toda una noche consumiendo por ejemplo".

-¿Cómo y cuándo hizo el "click" y decidió dejar de consumir?

-Cuando estuve harto de estar harto. Cuando me di cuenta que ya no quedaba más, que lo que venía era la muerte, decidí parar y pedir ayuda. En mi caso no hubo un momento específico sino una serie de pérdidas de momentos con gente que quería, incluso la muerte de muchos amigos y conocidos a causa de las adicciones. Hoy a la distancia me doy cuenta que eso es lo más doloroso.

Pidiendo ayuda, el entrevistado comenzó a asistir a grupos anónimos de recuperación de los que afirma: "Me salvaron la vida. Solo no hubiese podido, la ayuda del grupo fue fundamental".

Siempre en recuperación

Su presente lo describe así: en recuperación. "Seguiré en recuperación toda la vida. No concibo la recuperación total, si creyera que yo ya estoy curado cometería el mismo error que cometen un montón de personas que llevan 15 años limpios, como es mi caso, y un fin de semana se dan un permitido de consumo sin saber que pueden morir de sobredosis en ese desliz".

Reconocerse

"Vivimos en una sociedad de adictos", manifestó el entrevistado y sostuvo que lo importante es reconocerse como tal para poder salir del círculo vicioso: "Estamos los que nos reconocimos adictos y los que creen que no son adictos pero lo son: a las bebidas, a las drogas, al celular, a la estética, a la comida, al juego, al porno, al poder, a muchas otras cosas, es un gran trabajo social el que hay que hacer para que aprendamos a soltar. Adicto viene de la palabra adictus que eran los esclavos en Roma".

Pedir ayuda

Por último, y a modo de mensaje, Pauls sostuvo: "Si estás del otro lado y tenés un problema de adicción te pido que evalúes qué cosas no podes dejar de hacer en tu vida o qué cosas haces compulsivamente en tu vida, qué cosas no podes dejar de hacer y como consecuencia perdés tiempos, momentos o la posibilidad de hacer cosas más importantes. Si algo de esto te está pasando pedí ayuda, hablá con algún profesional porque otra vida es posible".