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Un grupo integrado por siete personas de entre 20 y 25 años sustrajo un par de mesas de la pizzería La Toscana, ubicada sobre la Avenida de Mayo. La Policía fue alertada y logró dar con la camioneta en la que transportaban los muebles y demoró a los muchachos.
Siete jóvenes de entre 20 y 25 años fueron demorados en la madrugada de ayer, luego de sustraer dos mesas de madera de una pizzería céntrica, en una travesura que terminó configurando un delito.
Los jóvenes involucrados en el hecho se movilizaban en una camioneta 4x4 y aprovechando el poco movimiento de gente que había en el Centro en ese momento, cargaron las mesas en la caja de la pick up y se retiraron. Sin embargo, un testigo avisó a la Policía y fueron interceptados a pocas cuadras.
El hecho se produjo minutos antes de las 7:00, en la pizzería La Toscana, ubicada sobre Avenida de Mayo, entre Alberti y Luzuriaga.
Cuando la camioneta Toyota Hilux de color gris, se detuvo frente al comercio, algunos de los jóvenes descendieron y cargaron en la caja dos mesas de madera que había en la puerta del comercio.
Sin embargo, la Policía fue rápidamente alertada y un móvil del Comando de Prevención Comunitaria interceptó el vehículo en Alberti y Echevarría con siete jóvenes de 20, 23, 24 y 25 años, en cuyo poder se encontraban ambas mesas sustraídas.
Los jóvenes quedaron imputados por el delito de “hurto”, en el marco de una causa que tramita ante la Unidad Funcional de Instrucción y Juicio Nº 7 a cargo del doctor Horacio Lasarte.
Otras detenciones
En otro orden de cosas, una pareja de jóvenes de 17 y 18 años, fue aprehendida cuando intentaba robar baterías de un camión Mercedes Benz, modelo 1634.
Efectivos policiales que ya habían sido alertados, llegaron al lugar y sorprendieron a estos dos delincuentes, quienes les habían quitado los tornillos de la batería sin llegar a sustraerla.
La Fiscalía del Fuero de Responsabilidad Penal Juvenil dispuso la aprehensión de ambos y más tarde se determinó que el joven mayor de edad, tenía un pedido de captura activo de julio del año pasado en una causa por robo.
Pidieron una pena de 20 años de prisión para el acusado de un crimen ocurrido en 2013
En el marco del juicio oral y público por el homicidio de Miguel Podevyls, ocurrido en octubre de 2013 frente a un almacén de Chilavert entre Córdoba y Laprida, el fiscal de juicio Horacio Lasarte pidió una pena elevada para el único imputado, Jorge Romero, un sujeto con amplios antecedentes, a quien se lo acusa de haberle disparado a “sangre fría” a Podevyls.
Durante las jornadas de debate fueron varios los testigos que declararon ante el Tribual Oral en lo Criminal de nuestra ciudad, como así también efectivos policiales y peritos de Científica.
Llegado el momento de pronunciar los alegatos, el fiscal Horacio Lasarte solicitó una pena de 20 años de prisión para este sujeto apodado “El Melli” por el delito de homicidio agravado por el uso de arma de fuego y como argumentos de su acusación tomó en cuenta los testimonios del sobrino de la víctima y el de un vecino, quienes observaron lo ocurrido y señalaron que el arma homicida la llevó el imputado, el cual disparó contra Podevyls, que se encontraba sentado sobre la motocicleta.
También introdujo como elementos de prueba el resultado de las pericias y el testimonio de los especialistas.
Por su parte, el defensor oficial de Romero, Lisandro Gargulinski, solicitó la absolución de su cliente por considerar que durante las jornadas de debate no se había podido comprobar con la certeza necesaria su responsabilidad y al no haber sido derribado el principio de inocencia, debía ser absuelto considerando el beneficio de la duda.
En forma subsidiaria solicitó al Tribunal que de ser encontrado culpable se lo condene por el delito de “legítima defensa o exceso de la legítima defensa” por entender que el disparo se produjo producto de un forcejeo y que el arma no la tenía Romero sino Podevyls.
La lectura del veredicto se llevará a cabo el miércoles, a las 12:00, en la sala de audiencias del Tribunal.
