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A principios de 2014 la Región Sanitaria IV y la Secretaría de Salud concretaron reuniones para realizar controles a los niños cuando comenzaran la escolaridad primaria. A nivel local esta iniciativa nunca pudo ponerse en marcha. Ahora piensan reflotarlo.
DE LA REDACCION. Hace poco más de un año la Secretaría de Salud del Municipio lanzaba los alcances del Programa de Sanidad Escolar (Prosane) una iniciativa impulsada por el Ministerio de Salud de la Nación que se iba a instrumentar en las provincias -a partir del trabajo integrado de las regiones sanitarias y los municipios- y que apuntaba a estudiar y hacer el seguimiento de la salud de la población incluida en el sistema escolar.
Después del anuncio oficial poco se supo sobre la ejecución de esta iniciativa en el plano local y en este contexto para saber si se había logrado poner en marcha y se había recabado información sobre el estado de salud de los chicos, LA OPINION tomó contacto con el secretario de Salud del Municipio, Leandro Peñaloza, que reconoció que “lamentablemente este programa nunca pudo implementarse porque nos encontramos con algunas dificultades para poder realizar las audiometrías a los chicos, uno de los estudios que contemplaba este programa, junto al control clínico y oftalmológico.
“Nosotros en Pergamino el año pasado no lo pudimos implementar porque había que firmar un convenio y teníamos algunas dificultades para cumplir con la realización de las audiometrías que había que practicar a los chicos, un estudio para medir la audición”, refirió el funcionario y recordó que por la ejecución del Programa se iba a pagar una cápita que suponía el trabajo de un oftalmólogo, un generalista, un pediatra y un fonoaudiólogo.
“La mayor dificultad la tuvimos con la audiometría, nos pedían ese estudio, pero como era capitado, la cápita era insuficiente para el costo que tenía ese estudio; viajamos a La Plata, junto a las autoridades de la Región tratamos de buscar algunas alternativas, fue avanzando el año, llegaron las vacaciones de invierno y desistimos de poner en marcha el programa, con la idea de reflotarlo este año”, señaló Peñaloza.
Nuevo anuncio
El secretario de Salud confirmó: “Queremos desarrollar este proyecto y hacerlo apenas podamos avanzar en el aspecto formal que tenemos tanto nosotros como la Región Sanitaria y que solo falta sentarnos para que el intendente lo pueda firmar”.
Con respecto a cómo se piensa resolver la dificultad que impidió avanzar en 2014, Peñaloza comentó que lo que se acordó es que las audiometrías se realicen solo cuando se detecte algún problema en la revisión que pueda hacer el fonoaudiólogo.
“Un fonoaudiólogo realizará un examen mínimo y en caso de que se necesite hacer una audiometría porque se detecta alguna dificultad, la realizaremos, pero no a la totalidad de la población escolar”, precisó.
El programa
El Programa de Sanidad Escolar (Prosane) consiste en la realización de chequeos de la población escolar al inicio y al egreso de su paso por la escuela primaria. Según autoridades sanitarias, esto permite trazar un perfil epidemiológico de la población escolarizada y en algunos casos que se detecte alguna patología, posibilita trabajar individualmente con cada chico en un seguimiento personalizado.
De acuerdo a lo que había sido comunicado en el lanzamiento de esta iniciativa, los controles se iban a concretar en los propios establecimientos educativos y no en los Centros de Atención Primaria, aunque nunca quedó claro cuál iba a ser la dinámica.
Los municipios que instrumentan este programa reciben un incentivo financiero, luego de presentar rendiciones por las prestaciones realizadas y de remitir los resultados correspondientes de los controles. Este beneficio consiste en el pago de una cápita por alumno al que se haya controlado.
El Programa de Sanidad Escolar supone la realización de controles oftalmológicos y un examen clínico general, además de estudios de fonoaudiología, es decir un control de salud integral de la población escolar.
En el caso de Pergamino se había señalado que en una primera etapa los controles iban a realizarse solo a niños que estuvieran en el primer año de la escolaridad primaria y no en el tramo final de este nivel educativo.
