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La Carta Orgánica del Bcra establece que el presidente de la entidad solo podrá ser removido si el jefe de Estado le imputa “mala conducta o incumplimiento de los deberes de funcionario público” o alguna infracción de las disposiciones contenidas en dicha norma. Remover a Vanoli desvela a la gente de Macri en caso de que éste llegue a la Rosada.
Buenos Aires, (NA) - Los asesores económicos del PRO comienzan a evaluar las posibles complicaciones que plantearía el escenario legislativo para remover al presidente del Banco Central, Alejandro Vanoli, en caso de que Mauricio Macri llegue a la Casa Rosada.
Macri no ahorra críticas al actual presidente del Banco Central, Alejandro Vanoli, que asumió el cargo en 2014, y en varias ocasiones expresó su deseo de que renuncie en caso de que él llegue a la presidencia.
Sin embargo, para remover al presidente del Banco Central (que tiene, por ley, una duración en el cargo de seis años) el Poder Ejecutivo necesita, primero, una razón fundada y, luego el respaldo del Congreso donde, según la proyección que arrojaron las Paso, mantendrá su mayoría el kirchnerismo.
Uno de los economistas que escuchan en el PRO indicó que se impone la necesidad de una devaluación y que estiman que deberá llevarla a cabo el próximo gobierno, para lo cual será clave el nombre de quien ocupe en ese momento la presidencia del Banco Central.
Según señaló el economista, las complicaciones que ven para este esquema derivan precisamente de los requerimientos técnicos y legales para reemplazar al presidente de la máxima autoridad monetaria.
Y es que la Carta Orgánica del Banco Central establece que el presidente de la entidad solo podrá ser removido si el jefe de Estado le imputa “mala conducta o incumplimiento de los deberes de funcionario público” o algún “incumplimiento” de las disposiciones contenidas en dicha norma.
Así lo hizo la presidenta Cristina Kirchner cuando quiso remover a Martín Redrado, que entonces se resistió a dejar el cargo, desatando una fuerte pelea judicial y una posterior reforma de la Carta Orgánica.
Pero además de poder imputarle “mala conducta”, el presidente debe contar con el consejo de una comisión del Congreso que avale la remoción del funcionario.
Esa comisión debe ser presidida por el presidente del Senado e integrada por los presidentes de las comisiones de presupuesto y hacienda y de economía del Senado, y por los de las comisiones de presupuesto y hacienda y de finanzas de la Cámara de Diputados.
Cómo remover a Vanoli
La tradición parlamentaria establece que, salvo por la comisión de economía, las presidencias del resto de los cuerpos son para el partido gobernante, con lo cual si Macri accediera a la Casa Rosada no tendría inconvenientes para contar con el visto bueno de esa comisión.
Sin embargo, la Carta Orgánica no especifica si la resolución de esa comisión especial tiene carácter vinculante o no y ésta es una de las principales preocupaciones del macrismo, según la fuente consultada.
A ello se le suma un obstáculo aún mayor: en el hipotético caso de que Macri pudiera dar razones legales para remover a Vanoli y contar con el apoyo de la comisión especial del Congreso, luego tendría que nombrar a alguien en su lugar y eso le resultaría casi imposible.
Es que la designación del presidente del Banco Central requiere de la aprobación del Senado, donde el Frente para la Victoria retendrá una mayoría muy holgada, incluso si saliera segundo en las elecciones de octubre.
Mientras tanto el nuevo jefe de la entidad monetaria podría ser nombrado “en comisión”, esto es, por decreto presidencial hasta que la Cámara de Senadores se expida sobre el tema.
Frente a este escenario, en el macrismo estiman que en caso de ganar las elecciones, la orientación de la política económica implicará necesariamente una disputa política compleja en el Congreso.
