El presidente de Federación Agraria encabezó una asamblea en Pergamino

Con la presencia de Omar Príncipe, las entidades de base del sur de Santa Fe y norte de Buenos Aires se reunieron en la filial local de la FAA para abordar los principales temas de la agenda del sector. Con un marco de importante de delegados de ambas provincias y autoridades nacionales de la entidad, analizaron la situación de los productores.

Este jueves estuvo en la filial Pergamino de la Federación Agraria Argentina (FAA) su presidente, Omar Príncipe, para abordar los principales temas de importancia para el sector.

Las entidades de base del sur de Santa Fe y Norte de Buenos Aires, que integran el Distrito VII de la Federación Agraria Argentina, reunidas en asamblea en Pergamino, con un marco de importante participación delegados de ambas provincias y la presencia de autoridades nacionales de la entidad analizaron la situación actual de los productores.

La asamblea contó con la presencia de delegados de filiales, dirigentes y productores del norte bonaerense y sur de Santa Fe de Alcorta, Arribeños, Arenales, Arrecifes, Santa Isabel, Wheelwright, Pergamino, Junín, Salto, Rojas, Ramallo, Chacabuco y General Villegas.

Jorge Solmi, dirigente de la Federación Agraria Argentina, aclaró que a la reunión estaban invitados funcionarios del Ministerio de Asuntos Agrarios de la provincia de Buenos Aires "pero a última hora se excusaron de poder asistir".

Los temas abordados durante la reunión fueron "la emergencia agropecuaria (por sequía), el aumento del Impuesto Inmobiliario y el Revalúo con aumentos mayores a lo que se había determinado por la Ley Fiscal, las tarifas del transporte de granos y las modalidades de contratación, las obras inconclusas para resolver las inundaciones", indicó Solmi.

Sebastián Campos, presidente de la filial Pergamino de FAA, agregó que "los productores estamos atravesando un momento muy difícil debido a la sequía que le pega muy duro a los cultivos; con un gobierno que no asiste a las reuniones cuando se lo invita y no escucha al sector".

Productores del sur de Santa Fe y norte de Buenos Aires participaron de la asamblea. (LA OPINION)

Panorama

A punto de cumplirse 10 años del conflicto agropecuario por la Resolución Nº 125, Omar Príncipe manifestó que "cuando se cumplen estas fechas analizamos en qué situación nos encontramos. Es un momento propicio para evaluar qué se consiguió, en qué puntos avanzamos, cuáles hay por conseguir todavía y de qué manera actuamos para poder lograr todo lo que demandábamos. La verdad que falta mucho, varios de los problemas estructurales que estaban en la Argentina de 2008 persisten después de 10 años. Ocurre que estos temas no están en la agenda política y mediática de 2018. El año pasado fue un año electoral y poco se habló del sector agropecuario, no estuvimos en esa agenda: no se trató la ley de humedales, la ley de arrendamiento lo mismo, la ley de semillas sigue sin tratarse y así podemos seguir, son temas muy importantes que plantean un cambio de la política agropecuaria y que están sin resolverse. Ni hablar de otros problemas como los fletes, la falta de financiamiento y las reformas impositivas para generar un impacto en la producción. De los muchos problemas estructurales que tenemos los pequeños y medianos productores, vemos que el impacto de la reforma fiscal y la reforma impositiva es negativo. Si hay algún productor agropecuario que tenía alguna esperanza que va a pagar menos impuestos, está equivocado.

-¿El Impuesto Inmobiliario llega con incrementos que están por encima de lo pautado?

-Sí, dentro del pacto fiscal el acuerdo que se realiza, dice que todos los inmobiliarios de todas las provincias vayan aumentando en forma gradual para acercarse al valor del mercado. Esto tenemos que tenerlo claro para saber dónde estamos parados y que en los próximos años van a saber viniendo aumentos del Inmobiliario sino cambiamos este modelo.

-¿Qué ocurre con el impuesto a las ganancias?

-La reforma que se ha implementado y que se sancionó contempla que, grandes contribuyentes, le baja el impuesto a las ganancias; mientras que el 95% de los productores agropecuarios, una figura unipersonal en la Afip, vamos a seguir pagando un 35% de aumento de Impuesto a las Ganancias.

Esto significa que vamos a ser menos competitivos que los grandes contribuyentes. Frente a grandes actores vamos a tener muchos problemas para poder competir con ellos.

-¿Se ha podido cuantificar el daño hecho por la sequía?

-Hay datos de la Bolsa de Cereales de Buenos Aires que bajó las estimaciones de soja de 54,5 a 50 millones de toneladas, mientras que la producción de maíz bajó de 41 a 39 millones de toneladas. Y podría haber 3.000 millones de dólares de pérdida. Lo peor es que no sabemos cuánto se puede estirar la sequía y cuanto más se puede producir, cada día que no llueve sabemos que las estimaciones pueden caer aún más.

-¿Cuál es la situación de las economías regionales?

-Lo que le están pagando a los productores por el durazno es nada, entre 2 a 2,50 pesos. La misma fruta que los consumidores pagamos 40, 50 o 60 pesos en la verdulería. Los productores también son víctimas de pagar los alimentos muy caros. Cuando decimos que los problemas estructurales de la Argentina estamos diciendo que los formadores de precios se están quedando con una renta extraordinaria de los alimentos que producimos en el país.

En esto hay una contradicción cuando se dice que queremos ser el supermercado del mundo y dependemos mucho del mercado interno.